Ha sido una forma de hacer historia. Es que la marca de camiones Otto y la cervecera Anheuser Busch concretaron la primera entrega de productos, Budweiser, en un transporte -prototipo- autosuficiente. Sí, un delivery sin conductor, aunque éste estuviera sentado a la derecha….por las dudas.
Fueron 180 kilómetros de Fort Collins a Colorado Springs y el cargamento consistió en 52.000 latas de la cerveza.
El conductor sólo estuvo especialmente atento a la entrada y salida de rampas, pero hasta se fue a dormir un ratito en la cama detrás de los asientos. La cervecera pagó 470 dólares por el servicio.
Otto es una empresa en desarrollo que trabaja en esta tecnología para los camiones de transporte. Fue comprada por Uber, que quiere revolucionar el transporte de cargas (¿y pasajeros?) sin depender de los conductores.
La tecnología de Otto se basa en cámaras, radar y sensores montados en el camión que le permiten ajustar la aceleración, el frenaje y el movimiento del volante, para un manejo seguro. De acuerdo a la empresa no se trata de sustituir a los conductores sino permitirles descansar en largos trechos, haciendo mas eficientes sus recorridos.
En los Estados Unidos el transporte por camiones es un negocio de miles de millones de dólares y una tercera parte es lo que se les paga a los camioneros.
Y no es la única compañía que está buscando este camino, ya que Daimler está desarrollando sus propios camiones auto suficientes en tanto Tesla ya ha manifestado que le gustaría entrar en este negocio en particular.
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