Sucedió en Francia, hace pocos días. Los chicos de Top Gear se encontraban grabando uno de los episodios de du nuevo DVD, cuando fueron interceptados por la policía gala. Los multaron, les quietaron la licencia y no pudieron continuar.
Cuando Top Gear no está al aire, los conductores realizan pruebas especiales que luego se venden en un DVD. Fue en la grabación de unas pruebas en Francia a un Aston Martin Vanquish, que conducía Jeremy Clarkson, y a un Porsche GT3 en manos de Hammond, que los presentadores fueron multados.
El motivo de que se quedaron sin licencia fue por exceso de velocidad. Según parece, Clarkson conducía a 141 km/h y Hammond a 143 km/h, cuando la ruta no permitía viajar a más de 90 km/h, y cuando el límite máximo en ese país es de 130 km/h. Tras la retención de sus permisos de conducir, los conductores de Top Gear quedaron inhabilitados para manejar en Francia por el término de 3 meses.
Tras el suceso, Clarkson dijo que los inspectores “nos dejaron en la carretera, sin un centavo y sin forma de conducir el Aston o el Porsche”, y agregó: “Si vas a romper el límite de velocidad, asegúrate de que no sea en Francia”.
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