Por Mario Uberti
No hay quien pueda ser indiferente. Hombre o mujer, jóven o veterano, rudo o no tanto…todos –quizás sin advertirlo- se tomaron unos segundos para desviar la atención hacia el cautivante DS3. Es que no hay manera de pasarlo por alto y por dónde sea, requiere de atención, dándonos un primer veredicto: si la idea era realizar un auto llamativo, ya es un éxito…
Claro, para ello, Citroen jugó fuerte, ya que a mi criterio –y he visto y probado varios autos del Chevron – es un modelo que rompe todas las tradiciones de la marca, en busca del redituable segmento de los autos prácticos, utilitarios y de lujo, dónde desde hace tiempo reina el Mini, y dónde también destacan los recién surgidos Alfa Romeo Mito y Audi A1.
El “DS” responde a “Different Spirit” (Espíritu diferente) y allí está la clave, pues no hay nada parecido y en su estilo es lo que el Ipod al Walkman…(Y si Ud. no entiende, disculpe, pero esta nota llegó a su fin…)
Está basado en el C3 y su éxito está basado en la estimulación visual que produce y que, mientras tomo apuntes, me hace sentir tan envidiado como al Peter de Paula Chaves (si no la conoce, pregunte…).
Estoy sentado en un auto negro, que de sobrio tiene poco, porque transmite deportividad, estilo, garra y corazón y que ha llegado a Uruguay como adelanto –ya se reciben reservas- pues el primer embarque estará aquí después del primer trimestre de 2011.
No tiene nada previo que haya inspirado a su equipo de diseño, nada que ver con el DS “antiguo” –al que también se le conocía como “Tiburón”-y por cierto mucho menos con el 2CV. Es absolutamente novedoso hasta en el logotipo, adelante, que indica que estamos ante el primero en llegar de la nueva camada DS.
Es realmente compacto, con 3.95 de largo, 1.71 de ancho y 1.46 de alto y con una silueta dinámica, atrevida y bien seductora, con resaltables rasgos únicos como las luces LED en los extremos de la carrocería, o su gran superficie vidriada atrás.
Lateralmente, y esto no es fácil de lograr, no hay cortes y todo fluye como el aire en un túnel de viento, y para esto hay que mencionar la ausencia del pilar “B” sustituído por la superficie vidriada que une las ventanas delanteras con las traseras.
La llantas de 17 pulgadas, denominadas “Bellone Diamantée Noire” me resultaron espectaculares y decisivas a la hora del enamoramiento a primera vista.
En su interior destacan las butacas envolventes, bajas, con una excelente posición de manejo en tanto en el tablero sobresalen las tres esferas de información (igual que en el C3) que junto al volante –en cuero y aluminio- de poco diámetro y una palanca de cambios bien personal le dan al DS3 un toque deportivo, de raza.
Es un cinco plazas, pues atrás van bien (algo apretaditas, es lógico) tres personas, con butacas tapizadas en cuero, apoya cabezas traseros, guantera refrigerada, levanta vidrios eléctrico, luz interior con lector de mapas, toma auxiliar, radio CD-MP3, regulador y limitador de velocidad, espejos exteriores de comando electrónico, vidrios totalizados y un detallecito, esa perilla clásica en Citroen, el perfumador de ambiente.
Como opcionales, a verificar en el momento de la compra, la planilla técnica establece: kit de teléfono manos libres, limpiaparabrisas con captor de lluvia y computadora, ayuda al estacionamiento.
Por sobre todo es evidente el esfuerzo en pos de la calidad
El motor, delantero y transversal, es el mismo 1.6, 4 cilindros, con inyección directa 16 válvulas Turbo, que se puede encontrar en varios Minis y Peugeots, con un torque espectacular que le coloca en el cero a cien apenas por arriba de los siete segundos, con un tope de potencia de 155 robustos caballos a cuenta del escaso peso de la unidad: 1.240 kilos.
La velocidad máxima, por catalogo está en los 215 k.h. confiada a neumáticos 205/45/17.
Tiene caja de sexta, bien deportiva, que colabora para un auto super ágil, bríoso, espectacular para cambios de ritmo, ideal para torear zorros en la congestionada Rambla, ahora forzada a 60….
En cuanto a consumo, en la Interbalnearia, a velocidad constante (110) me dio 320 con 20, en tanto en ciudad (en hora pico) 180.
En seguridad, el Citroen DS3 alcanzó una puntuación máxima en el test de EuroNCAP, logrando 87% en protección a adultos, 71% en protección a niños, y un 83% en sistemas de seguridad generales.
Entre sus sistemas incorpora: estructura reforzada, seis airbags (dos frontales, dos laterales y dosde cortina) sin olvidarnos del ABS, ESP, ASR, AFU..y todas esas siglas que ya se van haciendo de serie en todo auto que se precie, como el DS3.
Pero además, anoté: alarma sonora de olvido de llaves y luces encendidas; antirrobo electrónico; cierre de puertas y baúl al iniciar la marcha, pedalera y reposa pies en aluminio, repartidor electrónico de frenaje (REF).
En el manejo salí con el preconcepto de un auto firme y por lo tanto saltarín a cuenta del lamentable estado de nuestras calles, pero me sorprendí pues sin perder su carácter, perdonó muchísimo los quiebres, grietas y pequeños pozos, en tanto asumió con dignidad los desniveles y cráteres omni presentes que la Intendencia (¿inversión, cuando?) nos impone en la diaria. En ruta me resultó impecable, y el chasis rígido es determinante para que el DS3 otorgue con creces lo que ofrece a simple vista.
Agilidad extrema para quien disfruta el manejar. Reacciones asombrosas, con un pique voraz y una estabilidad impecable, hacen del modelo un auto tremendamente disfrutable, no sólo a la vista.
En definitiva, un auto que flecha corazones a simple vista y del que uno muy pronto se enamora. Tan es así que me han dicho que Oversil S.A., representante Citroen ya tiene una excelente lista de reservas para el DS3. ¡Bienvenue!
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