Lewis Hamilton ingresó al Project One y conversó luego en el escenario con Dieter Zetsche, principal de Daimler.
Lunes de noche, velada de gala en el stand de Mercedes Benz del Salón de Frankfurt, que en horas abre sus puertas al público. Es que con motivo de su “50 Aniversario”, se presentó al muy esperado “Project One”, un Hypercar desarrollado por Mercedes AMG que es excepcional en sus formas, y es potenciado por un motor V6 de 1.600 cc derivado del que utiliza el equipo de F1 de la casa de Stuttgart.
Y Mercedes quiso remarcar este hecho con Lewis Hamilton ingresando al “Project One” al escenario, dónde lo esperaba Dieter Zetsche, presidente de Daimler. “Espero tener al primero” dijo Lewis al micrófono…
Sólo se producirán 275 unidades y ya están todos vendidas a un precio tan imponente como el auto: 2.250.000 Euros. Y Mercedes impuso a quien venderle, pues el comprador tenía que cumplir algunos requisitos: primero, demostrar haber poseído un Mercedes desde hace largo tiempo y además acreditar que el auto será utilizado activamente, es decir que el dueño lo va a manejar y que la compra no es para especular con el precio o para guardar en una colección, sin uso. Aparte de ello, cada nuevo dueño sabe que las entregas serán por sorteo y a partir de 2020.
El modelo es cautivante, con tres detalles que se imponen ya en un frontal agresivo con ópticas LED triangulares, un splitter y tomas de aire en color negro, el mismo de las salidas de aire en el capó. Las puertas tienen apertura de “tijera” en tanto la “aleta de tiburón” esconde una toma de aire, similar a las que utilizaba la F1 hace muy poco.
A nivel mecánico, Mercedes-AMG recurre a un sistema de propulsión muy conocido en el mundo de la competición, ya que emplea el conjunto -motor y transmisión- del Mercedes-AMG W06, monoplaza con el que la marca domina en el Mundial de Fórmula 1 desde 2015. Un bloque V6 de 1.6 litros con un turbocompresor extra para un potencial de unos 750 caballos de potencia, pudiendo alcanzar las 13.500 rpm.
Las prestaciones del motor V6 se complementarán con la potencia de cuatro motores eléctricos, dos en su eje delantero, otro en el cigüeñal (161 caballos) y un cuarto como turbocompresor eléctrico (107 caballos extra). El resultado, 1020 caballos de potencia total para un modelo que además contará con una autonomía eléctrica de 24 kilómetros. Con el objetivo de alcanzar una relación peso/potencia de 1:1, se ha logrado una transmisión que sólo pesa 420 kilogramos. El motor y la caja de cambios de ocho velocidades son parte estructural del chasis monocasco de fibra de carbono y a una carrocería ultraligera de idéntico material. Gracias a todo ello, el Mercedes-AMG Project ONE puede alcanzar los 354 kilómetros por hora, acelerando de 0 a 100 en 2,5 segundos.
Vista del interior del Project One. (Foto: Mercedes AMG).
Ofrece diversos programas de conducción, desde el modo totalmente eléctrico hasta el de máximo rendimiento, que la marca alemana identifica con el que sus monoplazas de F1 usan en clasificación (el conocido como ‘botón mágico’ que tan buen rendimiento le ha dado a la escudería). También hay un programa para “picar” al máximo y que le permite alcanzar los 200 km/h en menos de seis segundos, desde partida detenida. Los frenos son carbono-cerámicos.
El Mercedes-AMG Project ONE, diseñado pensando en un auto bien liviano, utiliza en forma masiva la fibra de carbono, y por su carácter tiene un interior bastante espartano, como el de un auto de competición. Destaca su volante, bien parecido al que se utiliza en Fórmula 1, su panel informativo en forma de pantalla a color horizontal y su segunda pantalla táctil, que sirve para datos sobre otros aspectos del vehículo.
El selecto grupo de adquirentes comenzará a recibir sus unidades a partir de 2020.
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