Los artesanos tuvieron, con el 350 GT como en otros casos, una tarea diíficl, la de retornar al auto a su estado original de cuando salió de la fábrica y eso requirió, en este caso 1.150 horas para la carrocería y el motor y 780 para toda el área mecánica.
Hasta la pátina del volante en madera y la radio original y un interior realizado de acuerdo a los manuales de su época.
El auto es hermoso de verdad y es el cuarto que se restaura en “Polo Storico”: un Miura, un LM002 y un Countach.
El nombre del 350 GT deriva de su motor, que es un V12 de 3,5 litros con levas cuádruples. El 350 GT tiene suspensión trasera independiente, mientras que Ferrari y muchos otros fabricantes aún utilizaban ejes traseros.
Estos autos están certificados por Lamborghini, en tanto la marca garantiza el stock de repuestos necesarios para el adinerado comprador.
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