Hasta ahora Bultaco había sido sinónimo de motociclismo, el tradicional de la época dorada de don Paco Bultó, quien la inauguró en 1958 (antes había trabajado en Montesa) o el más moderno con la recuperación de la marca concretamente en 2014, a través de motos eléctricas. Pero ahora, la marca española ha ido un poco más allá con la presentación de su primer auto: el Bultaco Linx.
El Salón de la Moto de Milán (EICMA) ha sido el escenario elegido para el primer Bultaco de cuatro ruedas. Aunque, por su peculiar estructura y características, tampoco está tan lejos de las motos. No en vano, el Linx es un coche muy ligero (apenas 850 kilos) pero a la vez potente (su motor TSi de origen Volkswagen puede llegar a entregar hasta 400 caballos).
Eso nos da una relación peso-potencia tan favorable como 2 kg por cada caballo, una de las claves de que el Linx alcance los 280 km/h (aunque podría ir más allá ya que tiene la velocidad punta limitada) o acelere de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos. Además, la marca asegura que el Linx es un coche muy ágil y dinámico.
Más detalles del Linx: su chasis es de aluminio con carrocería en materiales compuestos, las suspensiones son de dobles triángulos (una configuración de carrera) con amortiguadores regulables, con caja de cambios secuencial ultra rápida y frenos de última generación (del fabricante Alcon-Galfer) con posibilidades de ajustar el reparto entre los ejes manualmente, según las especificaciones ofrecidas por el fabricante.
El Linx (nombre que hace referencia al lince ibérico) era un proyecto que Bultaco manejaba desde hace años y que ahora será factible gracias a la nueva etapa de la marca. Se fabricará en las instalaciones de Molins de Rei, Barcelona.
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