Sebastien Bourdais vivve en St. Petersburg y la ciudad cuida a los locales. Ganó el año pasado y ayer.
El año pasado había largado vigésimo primero, y esta vez décimo cuarto. Y repitió la victoria, Sin duda que el circuito de St. Petersburgo le cae muy bien a Sebastien Bourdais quien ayer heredó la victoria en una carrera dónde ya su tercer puesto era una gran conquista, pero la victoria le cayó de arriba en una carrera en la que tuvo hasta una detención inesperada, al comienzo, por un pinchazo.
Es que a dos vueltas de la bandera a cuadros, quienes vimos la carrera, no podíamos creer que tras un Safety, en el relanzamiento, los dos primeros iban a tocarse, dejándole a Seb el camino libre a un inesperado triunfo. Debió haber sido para el novato canadiense Robert Wickens, quien había hecho la Pole y manejó la carrera en forma notable, hasta que en la curva 1, Alexander Rossi, trató de meterse por adentro, lo tocó y el pobre “rookie” se llevó un abandono en la que debió haber sido su gran tarde de gloria.
Rossi ya tocó a Wickens quien se pega contra las defensas. No fue una maniobra feliz de Alexander y el canadiense, que tenía prácticamente ganada la carrera, terminó afuera.
Lo merecía sobradamente, porque tuvo un auto excepcional, en el que mucho tuvo que ver otra novata, la Ingeniera Leena Gade, quien llegó al equipo Smith Patterson Racing desde Audi, dónde fue la primera mujer Ingeniera en ganar con “su” auto las 24 Horas de Le Mans.
La tenía ganada, es más a diez giros del final se había distanciado de Rossi, pero cuando René Binder pegó contra las protecciones e ingresó el Safety, se esfumó la diferencia y quedaron todos juntos. Wickens manejó bien el relanzamiento, pero habría otro cuando Max Chilton hizo un trompo tras el cual se le apagó el auto en un lugar complicado. Volvió a salir el Safety y a dos del final, al re lanzarse, Wickens aceleró confiado, pero por el lado de afuera de la recta. Por el interno se vió la intención de Rossi de intentar ganarle la cuerda. Pero sólo pudo meter la nariz y debió -para mí- haber respetado el radio ideal de Wickens que, cuando empezó a doblar se encontró con la trompa del auto de Alexander que lo empujó a un trompo, destrozándole la ilusión de ganar en su debut.
Rossi también se vió afectado, aunque pudo seguir, pero siendo superado por Bourdais y Graham Rahal, quien terminó segundo después de largar desde la última posición de la grilla.
Alexander Rossi y Graham Rahal flanquean a Sebastien Bourdais quien volvió a ganar a sus 39 años.
Wickens, de 28 años, se llevó para su Toronto natal una enorme decepción pero las felicitaciones de todos por su gran tarea. El mal cálculo de Rossi (que terminaría tercero) es de las maniobras frecuentes en el automovilismo, de esas que salen mal, pero realizadas en el honesto intento de ganar un lugar. Hoy, Rossi, ya ganador de unas 500 Millas, también debe estar apenado por su colega.
En definitiva, victoria para Bourdais ( Campeón de la Champ Car de 2004 a 2007) que no ganaba desde esta misma carrera en 2017 y que sufriera aquel tremendo accidente en las prácticas para las 500 del año pasado, dónde resultara con varias fracturas. Hasta él, con 38 años, dudó si podría volver y fue una larga recuperación la que tuvo que enfrentar antes de regresar para las tres últimas pruebas del año pasado.
Ahora, Sebastien, quien reside justamente en St. Petersburg, no sólo probó que pudo volver sino que también volvió a ganar. Esta vez, por herencia, pero bueno, en el automovilismo tener el Reel lanzado y a la espera, trae presas inesperadas.
En esta carrera participaron tres de los rivales de Santi el año pasado en la Indy Lights: Zachary Claman de Melho (17), Matheus Leist (24) y Zach Veach (16) siendo el primero quien mejor hizo las cosas llegando a estar quinto en un tramo de la carrera. La próxima será en Phoenix el 7 de Abril.
RESULTADO FINAL DE LA PRIMERA FECHA DE INDYCAR
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