El modelo más grande que fabrica Lamborghini renovó su diseño y aumentó su potencia: ahora el motor de 12 cilindros en V entrega 740 caballos de fuerza. Tiene tracción y dirección en las cuatro ruedas. En Europa cuesta 382.000 euros.
Cualquier modelo que salga de la planta de Sant’Agata Bolognese causa revuelo. Los diseños que caracterizan a los modelos de Lamborghini rompen el molde de los deportivos y cautivan hasta a aquellos que no son apasionados por los autos. Pero si la novedad hace referencia al buque insignia de la marca, entonces la atención es mayúscula. Es que el constructor de deportivos adelantó cómo será su nuevo Aventador S, una cupé que eleva su potencia y recibe mejoras en su diseño, su aerodinámica, suspensión y sistema de tracción.
Lamborghini mantiene el motor de 12 cilindros en V aspirado, sin ningún tipo de sobrealimentación, pero lo ha mejorado, lo que le permite ahora entregar unos 40 caballos más y alcanzar así la brutal cifra de 740 caballos de fuerza. El torque de 690 Nm no ha cambiado pero sigue siendo un valor extraordinario. Lo mismo que sus números: de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y alcanza los 340 km/h de velocidad máxima.
Aunque no sea un problema para quien compre este modelo, que en Europa arranca en los 382.000 euros, para reducir el consumo de combustible el Aventador S cuenta con un el sistema Stop & Start (que apaga el motor cuando el auto está detenido y lo vuelve a encender al retomar la marcha) y un dispositivo que desconecta algunos cilindros si no se va a usar toda la potencial. La caja de cambios es automática de siete marchas.
Comparada con la versión anterior, esta cupé es 17 milímetros más baja debido a las modificaciones aerodinámicas que recibió. Además, se cambiaron los paragolpes, difusores de aire delanteros y el alerón trasero, que se puede tener tres posiciones distintas para modificar la carga aerodinámica en función de la velocidad y del tipo de manejo seleccionado.
La suspensión se ha modificado para aumentar la rigidez así como los controles electrónicos de la misma para hacerla más eficiente. El modelo está realizado en fibra de carbono y, a la tracción integral, se sumó un sistema de ruedas traseras direccionales. De este modo, cuando se mueve el volante a baja velocidad, las ruedas traseras giran en sentido contrario a las delanteras. En cambio, a alta velocidad, el giro es en el mismo sentido en las cuatro ruedas.
Los cambios en el interior obedecen a la actualización del tablero de instrumentos, compuesto ahora por una pantalla y a la mejora de la central multimedia, que ahora es compatible con Apple CarPlay. Opcionalmente se puede agregar un sistema de telemetría que brinda información sobre el vehículo y sobre el manejo en pista. Que es el lugar en donde de verdad se debe disfrutar una maravilla como ésta.
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