Otra vez un francés, otra vez Volkswagen, y otra vez de forma anticipada. Sébastien Ogier consiguió, en Australia, su tercer campeonato del mundo de rally, sumando 12, de forma consecutiva, los laureles a Francia. Es que Ogier ha heredado la senda ganadora de Loeb, trasladándola de Citroën a Volkswagen.
Fueron necesarios siete triunfos en nueve fechas para que Ogier descorchara el champagne más importante del año, el que destapó con su fiel escudero, Julien Ingrassia. Australia lo le fue sencilla a la dupla, que debió acelerar con todo, pues el también Volkswagen tripulado por Latvala -único piloto capaz de impedirle el título- se las ingenió para incomodar al francés.
El Rally de Australia fue muy disputado, y tanto Latvala, que finalizó segundo, como Kris Meeke, que fue tercero, supieron liderar los tiempos y presionar a Ogier, cuando tomó la punta. Pero la presión estaba en ellos, y no en Ogier, pues al francés, de no haber logrado el campeonato, aún tenía tres fechas más de margen.
De hecho, los Volkswagen de Latvala y el vigente campeón del mundo no parecieron ir a dominar al inicio, sino que se tomaron los primeros compases con calma – siendo Mikkelsen y después Meeke el que tomase la delantera del rally.
Sin embargo, sobre el final de la segunda etapa, Ogier había logrado descontar tramo a tramo, y pese a encontrar pisos inconvenientes, el francés se situaba líder por muy poco frente a Meeke, menos de un segundo, y por menos de tres segundos sobre Latvala.
Los Volkswagen tuvieron mejores condiciones en la última etapa, pues el orden de salida inverso les dejó con un mejor piso para poder acelerar. Así que Ogier marcó scratch desde el principio de la jornada final, yendo directo al título.
El ritmo de Ogier no fue igualado por nadie, así que el francés se aseguró, sobre el final del rally, la victoria y el título. Ogier quiso rematar la faena con estilo y consiguió los tres puntos del Power Stage, además de la victoria y el tercer título consecutivo tanto para él como para Volkswagen Motorsport.
Ya con los dos campeonatos cerrados, el WRC volverá a principios de diciembre, con el retorno del Tour de Córcega al calendario.
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