—
Sébastien Ogier y Carlos Sainz han estado en los últimos días en Almería dedicados a una extensa sesión de pruebas sobre tierra del Volkswagen Polo R WRC. Han sido más 700 km, el recorrido de dos rallyes del Mundial aproximadamente, los que han cubierto entre ambos, sometiendo al coche a un duro castigo para medir su resistencia en el principal terreno en que se disputa el WRC.
La colaboración entre el veterano Campeón español y el joven aspirante francés parece haber sido excelente, llegando Sainz a subirse en la butaca derecha con Ogier al volante, algo bastante inusual.
“Carlos Sainz y Sébastien Ogier están trabajando extraordinariamente bien juntos, formando un tándem perfecto. Se respetan mutuamente, sin rivalidad, y están impulsando el proyecto con gran determinación. Nuestro siguiente paso será realizar más pruebas sobre asfalto para poder completar nuestro libro de especificaciones y así poder ir avanzando en la preparación.”, declaraba Kris Nissen, Director de Volkswagen Motorsport.
Ogier, asistido en la butaca derecha por copiloto Julien Ingrassia, manifestaba por su parte: “Para nosotros, se trataba básicamente de conducir el máximo de kilómetros con este coche sobre terrenos muy duros. Paralelamente, realizamos algunos pequeños cambios en la puesta a punto para ir ganando velocidad paso a paso.”
Sainz contó con la presencia de su veterano copiloto alemán Timo Gottschalk para las pruebas y al cierre declaraba: “Tengo mucha confianza en el equipo y no dudo que el Polo R WRC será toda una sensación. Pero no debemos olvidar que 2013 será el primer año del Polo en el Mundial, mientras que los competidores llevan muchos años en liza”.
—
DOSEFES
(Fotos: VW Motorsport)
Comentarios