No muchos saben que su segundo nombre era Anselmo y que de chico quería ser periodista. No preveía ser un ícono y al cumplirse treinta años de su fallecimiento, el 14 de Agosto de 1988, el mundo automotriz muestra claramente cuanto ha significado y significa el nombre Enzo Ferrari, a cuyo homenaje nos sumamos hoy con esta pequeña nota, tan insuficiente como las decenas de libros que se han escrito por él.
Nació en Módena, hijo de Alfredo, quien un día de 1908 llevó a sus dos pequeños hijos, Dino (por Alfredino, dimunitivo de Alfredo) y Enzo, a ver una carrera de autos, en la que ambos resultaron deslumbrados. El primer acercamiento a lo que ya era una pasión fue el ingreso de ambos a una escuela de ingeniería mecánica.
La tragedia marcó a la familia ocho años mas tarde, cuando “Dino” -tras pelear en el frente en la Primera Guerra Mundial- falleció por una distrofia muscular.
La familia a punto estuvo de lamentar la pérdida de Enzo cuando éste contrajo pleuresía en 1917, tras ser reclutado por el ejército. Pero logró superarla y a sus 20 años, con una carta de recomendación del Coronel de su Regimiento se fue a Turín, solicitando trabajo en Fiat. Pero no lo tomaron.
Un año después consiguió enrolarse en una pequeña empresa fabricante de automóviles, llamada CMN, en Milán. Con sus ahorros se compró un Alfa Romeo usado, para probar como piloto, pero en cuatro años no obtuvo resultados destacables, aunque sí llamó la atención de los directores de la marca, a quienes les pidió ser vendedor, en tanto dirigía un pequeño equipo de trabajo en un sector de competición en la “Anonima Lombarda Fabbrica Automobili”, que adopta como símbolos la cruz roja sobre campo blanco de la insignia de Milán y el “Biscione”, la serpiente sobre campo azul, símbolo de la familia Visconti.
El gran talento de Enzo era volanteando pero como director deportivo de un equipo oficial que luego se convertiría en Scudería Ferrari. Fue en 1947 cuando se estableció por su cuenta en Maranello, financiando con la producción de autos deportivos sus avatares en el automovilismo.
Se casó dos veces. Con Laura Dominica Garello en 1923 y con Lina Lardi, en 1978. Con la primera tuvieron a Dino, trágicamente fallecido a sus 24 años en 1956, y a Piero nacido en 1946, quien a sus 72 años posee el 5% de las acciones de Ferrari.
Enzo Ferrari fue sepultado en el panteón familiar en la iglesia de Maranello. Allí sus restos reposan junto con los de su hijo “Dino”, con los de su esposa Laura y con los de sus padres y hermano.
Enzo Ferrari recibió el galardón de “Cavalieri” por sus méritos deportivos en 1924 y siguió obteniendo honores de su patria: “Commendatore” en 1927, “Cavalieri di Lavoro” en 1952. Durante 1960 recibió un título honorífico en ingeniería mecánica por parte de la Universidad de Bolonia. En 1988 la Universidad de Módena y Reggio Emilia le concedió el de Física.
Bajo su dirección (1947-88) Ferrari ganó más de 5.000 carreras en todas las categorías y obtuvo 25 títulos de Campeonatos Mundiales.
La Scudería Ferrari ha logrado 16 Campeonatos de constructores (1961, 1964, 1975, 1976, 1977, 1979, 1982, 1983, 1999, 2000, 2001, 2002, 2003, 2004, 2007, 2008) y 15 de Pilotos (1952, 1953, 1956, 1958, 1961, 1964, 1975, 1977, 1979, 2000, 2001, 2002, 2003, 2004, 2007), convirtiéndose en el equipo de competición mas laureado de la historia. Además ha logrado 231 victorias, 217 Poles y 244 récords de vuelta.
El aniversario de su deceso ha significa una ocasión especial para recordarle a través de numerosos y sentidos homenajes a todo nivel. Sólo sumando todas las letras empleadas en recordarle se podría estar a su altura….