Corría el año 2005 cuando Bugatti sorprendía al mundo con un auto impactante: el Veyron. Impactante por su motor, impactante por su diseño, impactante por su precio. El Bugatti Veyron se posicionaba desde el inicio como un ícono de la industria automotriz. Nació para demostrar de lo que era capaz el grupo VAG, propietaria de la firma, y las pérdidas económicas no frenaron su desarrollo. Es así que desde 2005 hasta 2013, el Veyron se ubicaba a la cabeza de pérdidas por auto producido, con unos 5.5 millones de dólares de déficit por vehículo.
En total se produjeron unos 450 autos de este modelo, entre el inicial y el último, el Grand Sport Vitesse La Finale, a un precio que superaba con creces el millón y medio de dólares. Pero el proyecto estaba allí, para romper récords.
Su motor W16 de 8 litros y cuatro turbos, sus más de 1000 caballos dependiendo la versión, y un trabajo aerodinámico impresionante le permitieron un récord de velocidad, con 431.072 km/h para un auto de serie, e hicieron que marcara 2.5 segundos para el 0 a 100 km/h.
El tiempo pasa, y hoy en día hay varios constructores que han plantado batalla, al menos en cifras, al Veyron, y lo que en su momento nos pareció descabellado (1000 caballos), hoy lo leemos con asiduidad.
Así que para la despedida, Bugatti preparó el siguiente video narrado por Brian Johnson, Jay Leno o Richard Hammon entre muchos otros, en un repaso de la corta historia del Veyron.
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