Falleció Stirling Moss, mucho mas que un Campeón sin corona

 

Un día triste este domingo de Pascuas para los aficionados mas longevos de la F1. Es que hoy falleció, a sus 90 años de edad, Stirling Moss, quien se llevó consigo el peso de haber sido “El Campeón Sin Corona”. Es que así muchas veces, la prensa y el publico se han referido a este inglés que fuera cuatro veces Vice Campeón, y que consiguiera 16 victorias, un récord para los pilotos que nunca consiguieron el título.

Hacía cuatro años que peleaba contra una enfermedad, iniciada por una infección en el pecho, que lo terminó por vencer hoy.

Moss y Fangio, rivales y buenos amigos.

A Stirling le tocó correr contra Fangio quien le eclipsó, como a todos los de su época, con sus cinco Campeonatos (1951, 54, 55, 56 y 57). En el que mas cerca estuvo  Moss fue en el 55, cuando firmó con Mercedes Benz, ganando su primera carrera en Gran Bretaña, pero siendo segundo del “Chueco” a fin de año. En la temporada siguiente se cambió a Maserati, pero volvió a ser Vice del argentino y en el 56, fue nuevamente el mejor del resto, con el equipo Vandervell.

Moss dejó una gran estadística en el libro de oro de la F1: 16 victorias, 24 podios, 16 poles y 19 récords de vuelta. Se retiró en 1962 tras un gran accidente en Goodwood, tras el cual -ya recuperado después de un mes en coma y seis meses en rehabilitación- dijo “mi habilidad ha disminuído, no corro mas…”

En 2006, La Federación Internacional de automovilismo (FIA), le concedió la medalla de oro, al considerarle como el mejor piloto de la historia de esta categoría que nunca ganó un campeonato, un premio consuelo que mejor no se lo hubieran dado….

Stirling Moss con Mercedes Benz durante su primera victoria en la F1, justamente el GP de Gran Bretaña en Aintree.

Para los amantes del automovilismo que no le vimos correr, por una simple cuestión de edad, el londinense Sir Stirling Craufurd Moss ganó nada menos que tres veces en Mónaco, tres en Monza y dos en el GP de Gran Bretaña que por ese entonces se disputaba en el circuito de Aintree y además consiguió 12 victorias en el Mundial de Resistencia, entre ellas las 12 Horas de Sebring, la Targa Florio del 55 y en cuatro oportunidades los 1.000 Kilómetros de Nurburgring, siendo  por esto y por su caballerosidad deportiva merecedor de la OBE (Orden del Imperio Británico).

Un personaje que brilló mucho mas alto que un Campeón sin Corona.