El pésimo clima no fue obstáculo para que en El Pinar se viviera una jornada de automovilismo muy buena. En términos generales, resumimos en que pilotos y técnicos estuvieron bien a la altura de las circunstancias para adaptarse rápidamente a las condiciones extremas del domingo y mostrar toda su capacidad y calidad.
No hubo serios accidentes ni errores gruesos de conducción. Entonces, debemos reconocer -una vez más- que el material humano en todo sentido es de primera calidad. Con sus matices lógicos, pero de primera calidad.
Todos, incluyendo organización de AUVO, estuvieron a la altura de las duras circunstancias y se salió adelante con un gran espectáculo en todo sentido, inmejorable tributo para el gran homenajeado: Gonzalo “Gonchi” Rodríguez.
Respecto a las competencias, ciertamente que Superescarabajos estuvo soberbia. Anotó un nuevo ganador -Matías Saporitti- y mostró trabajos notables como el de Ignacio Massat, Matías Abella, Felipe Dogliani, Fabián Messano y Pablo Santana. Fue la carrera del domingo.
En cuanto a pilotos y en un contexto donde en términos generales los 120 que compitieron se manejaron todo debido a las complejas condiciones, destaco -para mi gusto- el trabajo del fin de semana de Carolina Cánepa. La Sonic Racing Cup viene evidenciando el claro y notorio avance en el pilotaje de las damas. La instancia en El Pinar lo ratificó. Tanto en seco (sábado) como lluvia (domingo), las chicas de la Sonic fueron la nota peleando de igual a igual por el absoluto. Fue allí que apareció combativa, con escasos errores, muy enchufada y con finos sobrepasos, la figura de Carolina Cánepa.
Estoy seguro que este fin de semana redondito para la bella pandense le será muy redituable en el futuro inmediato porque le hará tomar una fuerte confianza en sí misma.
Tendremos en los que queda del año más buenas noticias de ella y de todas ellas en la Sonic.
MARIO ROSA
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