Con un clima festivo. Así se despidió la temporada de los campeonatos nacionales de velocidad en pista, en las finales celebradas en el Autódromo Víctor Borrat Fabini de El Pinar. Es que los campeonatos de todas las categorías se definieron hoy, y los espectáculos brindados al numeroso público allí presente, fue excelente.
…..
Como anticipábamos tres eran los pilotos que podían llevarse la corona de la máxima categoría del automovilismo. Fernando Rama, Fabricio Larratea y Daniel Ferra eran los hombres que tenían chances, pero todo hacía pensar que la cosa estaría entre Rama y Larratea. Larratea llegaba a la última carrera con el auto mucho más liviano que el del resto, y rápidamente conseguía la pole position, desde donde partió hoy, con Rama en sus escapes, y Ferra bastante relegado.
Los semáforos dieron el aviso para la largada y Larratea partió en punta, seguido por Rama que cerraba la cuerda y por Jorge Pontet. Ferra por su parte se colocaba en la novena posición.
Rápidamente Larratea estableció una buena diferencia para con sus perseguidores, mientras que Pontent parecía tener un auto un poco más rápido que el de Rama, no dejando que el hombre de la Peugeot se le fuera muy lejos. Ya en la segunda vuelta entró el Safety Car, que achicó las diferencias que Larratea venía haciendo.
Cuando se relanzó la carrera, la fila india seguía tal cual, habiendo solo un movimiento: el de Ferra al octavo lugar, aunque más adelante, Alfredo Mariño venía bastante inquieto y mejoraba su ritmo vuelta a vuelta, colocándose en los escapes de Pontet, que a su vez estaba pegadito al segundo.
Tras una buena maniobra y velocidad final suficiente, Mariño logró superar a Pontet al final de la recta opuesta, cambiando la tercera posición de la carrera.
En la novena vuelta nuevamente ingresó el Safety, lo que provocó, una vez más, que la diferencia entre Larratea y sus escoltas volviera a extinguirse.
Hasta aquí Rama era el campeón, pero al relanzarse la carrera, un golpe de escena: Mariño superaba a Rama y se colocaba segundo, por lo que el hombre de la Peugeot veía como su campeonato desaparecía.
Pasaban las vueltas y el auto de Mariño era inalcanzable por la pesada Peugeot de Rama, ahora tercero, que a su vez recibía los embates de Pontet.
Pero todo cambió en la decimotercer vuelta, cuando el auto de Alfredo Mariño dijo ‘no va más’, heredando el segundo lugar Rama, volviendo las cosas como antes: Larratea, Rama y Pontet al podio.
Por unos momentos parecía que Larratea perdía rendimiento en su auto, y se apretaban los tres primeros, con una tremenda lucha de Rama por prevalecer sobre Pontet, hasta que, en la última vuelta, Paullier superó a Pontet, se colocó tercero, y luego Pontet tuvo un pequeño fuera de pista que lo relegó hasta el séptimo lugar.
Daniel Ferra, con su Clio bastanta lento, muy cargado, y con un rendimiento regular, se colocaba, de todos modos, en la cuarta plaza, pero no le alcanzaba para el campeonato.
Paullier fue el último escollo en el campeonato de Rama. Es que la camioneta ya estaba con muy poco rendimiento, y Paullier era mucho más rápido, pero solo faltaban escasos metro para la bandera a cuadros. Y la bandera se ondeó con fuerza, para que Larratea se llevara la última fecha del año y Rama un merecido campeonato, al arribar segundo. El podio lo completó Paullier, mientras que Ferra acabó cuarto, sin chances de arrebatarle el título al de la 207.
“Este campeonato no lo gané yo, lo ganó mi equipo, lo ganamos todos juntos y eso es lo lindo. Trabajamos en equipo y nos unimos más que nunca, en las buenas y en las malas. El año pasado terminamos muy mal y este nos levantamos” señaló Fernando al culminar la carrera.
“Para ser campeón hay que contar con una cantidad de cosas. Quizás con lo que nunca conté en ningún otro campeonato fue con esa cuota de suerte que hay que tener. Este año nos tocó un poquito, pero creo que bien merecido lo teníamos” continuó.
“Le dedico el campeonato a mi equipo, a toda mi gente, a los que siempre nos apoyaron, a los que hoy por distintas circunstancias no nos están acompañando, y a todos los patrocinadores” concluyó.
…..
La familia Pessina prometía una tremenda final del Turismo Libre. Los hermanos Diego y Marcelo llegaban muy juntos al final del campeonato, ambos con chances, ambos con buenos medios mecánicos, y ambos teniendo los dos primeros lugares de la carrera final.
La categoría se preparaba para su última carrera con copilotos, pues el año que viene no estarán más, con Marcelo por delante de Diego y con Leonardo Silva partiendo desde la tercera posición.
Apenas largaron Diego se le puso a la par de Marcelo, ya poniendo los nervios de punta en el equipo. Diego tenía el auto un poco más rápido que el de Marcelo, quien aguantó los primeros metros, pero Diego le mostraba el Ford por todos lados, hasta que logró superarlo y pasar a comandar las acciones de la categoría.
Una vez que Diego picó en punta comenzó a establecer un excelente ritmo, distanciándose rápidamente de su hermano, que continuaba segundo, perseguido por el hombre de los radiadores.
En la quinta vuelta Marcelo recuperó un poco el ritmo y se acercó al líder, achicando diferencias. Llamaba la atención el tremendo ritmo de Alexis Castro. Castro largó desde los últimos lugares, y apenas pasadas siete vueltas se colocaba séptimo junto con su Fiat Uno, siendo un segundo más rápido que el mejor tiempo del puntero.
Durante dos vueltas estuvo el auto de seguridad en pista, entra la vuelta siete y la nueve, alineando un trencito detrás de Diego.
El auto se retiró, y Diego relanzó la carrera de muy buena forma, estableciendo nuevamente una buena brecha.
Por el tercer lugar venían peleando Leonardo Silva y Carlos Silva, hasta que el primero de ellos, entrando a la curva “Gonchi”, perdió el auto, se fue afuera, y perdió el tercer lugar a favor de Carlos.
Sobre la vuelta 11 el rendimiento del auto de Marcelo Pessina comenzó a mermar. Marcelo era superado por tres máquinas, cayendo a la quinta posición, mientras que ahora estaba Silva segundo y Castro en el tercer puesto, tras remontar más de 10 lugares.
Lo cierto es que el nerviosismo en el box de Marcelo Pessina fue en aumento, pues el piloto debía quedar entre los 7 primeros, sino su hermano, puntero de la carrera, sería el campeón.
Las miradas se centraban en el auto de Marcelo Pessina y en la lucha entre Porto y Castro por el tercer lugar.
A escasas vueltas del final Porto superó a Castro, quien intentó devolver la gentileza al final de la recta principal, pero perdió el auto en el frenaje, cruzándose por delante de Porto, que alcanzó evitarlo, terminando contra el guard rail.
Finalmente la carrera concluyó con Diego Pessina en lo más alto del podio, seguido por Carlos Silva y por Gabriel Porto, mientras que Marcelo Pessina arribó quinto, lo que le alcanzó para festejar el título de la categoría.
“Los campeonatos no se merecen, y nosotros luchamos hasta el final. El auto se me quedaba en el cajón, en el parador, pero llegamos” señaló el flamante campeón.
…..
Con Michell Bonnin, Fernando Mengot y Gustavo Zucco adelante, comenzaba la última del año de Superescarabajos. El candidato al título, Víctor Morales, quedaba en la duodécima posición.
Las dos primeras vueltas de la carrera tuvieron como protagonistas a Bonnin y Mengot. Bonnin no lograba resistir el ritmo de Mengot, que tenía un muy buen auto, y a pesar del aguante, Mengot lo superaba cuando finalizaba el segundo giro.
En la tercera vuelta ingresó el auto de seguridad, volviendo a cero las diferencias entre los autos. Morales por su parte, seguía encaramado en la posición número doce.
Tras la bandera verde posterior al safety car, Bonnin volvió a tomar el control de la carrera, dejando a Mengot en el segundo lugar. Zucco seguía tercero, mientras que Morales ascendía una posición, quedando onceavo.
La undécima vuelta generó el abandono de Zucco, heredando González la tercera posición, cuando nuevamente ingresó el safety car.
A dos vueltas del final se relanzó la carrera, con Morales en el decimo lugar, Bonnin primero, Mengot segundo y González tercero, y así finalizó. Este resultado proclamó como campeón de la monomarca a Víctor Morales, obteniendo su segunda corona.
…..
La Fórmula Vee consagró campeón a Norberto Verdecchia, tras una excelente carrera entre él y el segundo en la carrera y en el campeonato, Matías Saporitti. Tercero finalizó Guzmán Nazabay.
Por su parte, Miguel Wohler se llevó un carrerón de la Fórmula 4, que proclamó a Frederick Balbi como el mejor del año. El campeón finalizó en el tercer escalón del podio y Hernán Flores en el segundo.
…..
Se fue el año de Auvo, y será hasta 2013 cuando los motores de pista vuelvan a rugir. Un 2013 que viene con todo para los de la calle Edil Hugo Prato, con dos monomarcas nuevas, con nuevos escenarios, y con más pilotos, agregando un mayor espectáculo además del ya brindado.
Hebert Paguas
Comentarios