Un auto con leyenda
Diego Maradona es un fanático del fútbol y también de los autos. Y en ese último rubro, Ferrari siempre fue su predilecta. Tanto que en 1987, en pleno apogeo por el título conseguido con la Selección en México 86 e idolatrado en el Napoli, compró una Ferrari Testarossa negra, que ahora es vendida por su segundo dueño, un coleccionista español apodado M.M., en una suma de 250 mil euros.
La Ferrari negra de Maradona fue la segunda que la escudería hizo en el mundo, ya que por ese entonces los vehículos de la marca sólo eran rojos. La primera había sido para el actor Sylvester Stallone. Mientras que luego de Diego quien siguió sus pasos fue Michael Jackson, quien para diferenciarse la hizo descapotable.
Cuando la tuvo en su poder, según reveló hace unos años Guillermo Cóppola, quien era su manager y se encargó de conseguirle la Ferrari negra, “Diego empezó a mirar para todos lados buscando el estéreo”. Cuando Cóppola le explico que era un auto de carrera y por eso no tenía “estéreo, aire acondicionado, nada”, Maradona -fiel a su estilo- le respondió “entonces que se la metan en el culo…“.
Claro que no lo hizo y la usó por un tiempo. No mucho ya que la Ferrari negra con sus tapizados en cuero blanco terminó con sólo 20.200 kilómetros recorridos. Al poco tiempo, cuando volvió a Argentina, tuvo que desprenderse de ella porque los impuestos para ingresar el auto eran demasiado elevados. Entonces, apareció M.M., quien en una entrevista con Autoblog contó que decidió venderla por un precio de 250 mil euros. ¿Por qué ahora? Simple: “Se acerca el Mundial de Brasil”, dijo.
“El auto se cuidó con mucho cariño y se conservó intacto tal y como lo dejó Diego Maradona. El vehículo tiene un valor añadido muy importante ya que perteneció a Diego Maradona y sabemos que más adelante su precio se triplicará, ya que es un clásico y con una gran historia. Porque Maradona siempre será Maradona, una persona que hizo historia en la Argentina”, cerró.
(Fuente: Autoblog)
LA DYNA SUPER GLYDE DE FRANCISCO
Una moto sagrada
En el marco del 110° aniversario de Harley-Davidson, Francisco I recibió una motocicleta de la marca americana como obsequio a mediados del año pasado. Desde un primer momento, la prensa italiana aseguró que sería imposible que el Sumo Pontífice use, en algún momento, estos vehículos. Es que, claro, resultaba difícil imaginárselo arriba de una Harley de 1.5 litros de cilindrada, paseando por el Vaticano con su vestimenta habitual y saludando a los fieles.
A raíz de esto, desde Roma surgió la idea de subastarla. Y la casa de remates londinense Bonhams se hizo cargo de organizar la operación de la Harley-Davidson Dyna Super Glyde que lleva la firma del Papa en el tanque de combustible. Será, entonces, el 6 de febrero en el Grand Palais, según informaron en un comunicado oficial.
La moto americana, donada por Francisco I a Cáritas Roma el pasado octubre con fines exclusivamente benéficos, se estima que alcance un precio de entre 12 y 15 mil libras; esto es, entre 14 y 18 mil euros.
Además, Bonhams subastará una campera de cuero negro con el logotipo de Harley-Davidson, autografiada por su Santidad en la parte izquierda de la pechera con una pluma de plata. Este atuendo clásico de los fanáticos de la marca tendrá un precio inicial de entre 1.000 y 1.500 euros.
“Nos honra increíblemente vender este artículo para Cáritas Roma. Esperamos que el Papa Francisco y Harley-Davidson se enorgullezcan de nosotros reuniendo una cantidad muy importante de dinero para una buena causa”, comentó Ben Walker, responsable de motocicletas de la subastadora.
El dinero que se recaude se destinará a la renovación del hostal Don Luigi di Legro, un comedor y albergue ubicado en la estación de trenes Termini de Roma, que asiste a cerca de mil habitantes carenciados de la capital italiana hace treinta años.
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