Tres carreras dónde pasó de todo, con lluvia, accidentes y polémicas definieron en la madrugada del domingo el Campeonato del WTCR. El húngaro Norbert Michelisz, con un Hyundai, se llevó el título, que por unos instantes en la última carrera estuvo en manos del argentino Esteban Guerrieri (Honda)., quien tocado por el español Azcona se fue al pasto, que taponeó el ingreso de aire al motor por lo que tuvo que ir a boxes para removerlo, perdiendo así toda chance.
Michelisz llegaba líder a estas últimas tres carreras con 15 puntos de ventaja sobre Guerrieri, 21 respecto a Muller y 30 con Björk con 75 en juego. Cuatro pilotos con chance matemática al título.
La primera carrera fue una lotería por las condiciones de la pista, húmeda pero con zonas secas que permitieron arriesgar con la elección de los neumáticos a varios pilotos. Michelisz hizo valer su “pole” para anotarse un triunfo que le aclaraba bastante las cosas. Y eso que Guerrieri , su principal rival por el título, hizo una gran tarea, remontando del noveno al cuarto puesto final.
En la segunda, con más agua en la pista que en la carrera anterior, algunos pilotos se la jugaron con slicks delanteros y el caos se adueñó del trámite. Guerrieri de nuevo voló bajo la lluvia y se llegó a poner primero (pese a que largó noveno) justo cuando una embestida del Hyundai de Nicky Catsburg a Yvan Muller provocó una montonera que terminó con el auto del sueco en llamas y el del francés, que aún tenía opciones de ganar el título, destrozado. En ese entrevero, el Hyundai de Michelisz también terminó fuera de la pista, aunque sin daños.
La bandera roja, que se extendió por casi una hora, salvó al húngaro… y al francés. El primero se benefició de la decisión de los comisarios para rearmar la grilla, respetando la clasificación del sector anterior al del accidente… cuando Michelisz no se había salido de pista (aunque iba 13º). en tanto Muller, aprovechó el tiempo para reparar los daños en su Link&Co y pudo volver a largar.
En la reanudación todos se calmaron e hicieron su trabajo. Guerrieri se hizo fácilmente de la punta, ayudado por su compañero de equipo y compatriota, Girolami y Michelisz remontó lo que pudo, de décimo tercero a octavo.
La tercera carrera, última de las 30 del WTCR 2019, parecía sencilla para Michelisz. Largaba desde la Pole y con 10 puntos de ventaja sobre Guerrieri, segundo en la grilla.. Parecía fácil: simplemente cuidarse del argentino, pues asegurándose una posición en el podio, el húngaro sería Campeón no obstante ganara Guerrieri. Pero todo cambió.
Esteban, tremendo piloto a quien conocimos en Uruguay corriendo en la categoría Mercedes Benz, largó y se colocó primero en tanto un ambicioso Azcona, que sería clave en el desenlace del campeonato, se coló entre los dos aspirantes al título. Eso dejaba a Michelisz en el filo de la navaja… y pocas curvas después, cuando Kristofferson le sobrepasó, el campeonato daba un vuelco en favor del argentino.
Sin embargo, Azcona quería ganar y fue en busca de Guerrieri, hasta que lo tocó obligándolo a una salida de pista en la que la suciedad que recogió su Honda tapó su refrigeración, elevando la temperatura del motor lo suficiente como para que el argentino tuviera que parar, para limpiar, en boxes. Y allí se acabó su posibilidad al título que le quedó servido a Michelisz. Gran bronca de Guerrieri y su equipo con Azcona, quien terminó siendo el árbitro del final del Campeonato con un toque evitable, máxime cuando su víctima era por ese entonces el líder del Campeonato.