Max Verstappen finalmente pidió perdón por sus críticas a los comisarios deportivos durante el GP de Estados Unidos, carrera en la que el holandés recibió una penalización de cinco segundos que le relegó de la tercera a la cuarta posición.
Verstappen estuvo ayer en la rueda de prensa previa del GP de México, donde admitió que sus palabras no habían sido correctas a pesar de su desacuerdo con el veredicto de Dirección de Carrera.
Luego, Max ha reiterado sus disculpas con una publicación en su perfil oficial de Instagram.
“Me gustaría pedir perdón otra vez por el lenguaje que usé después del GP de Estados Unidos. Hice mis comentarios en el calor del momento. Sé que las palabras que usé fueron inapropiadas. No estaban dirigidas a nadie. No quería ofender. Espero que podamos pasar página y disfrutar de este fin de semana”.
En Austin, Verstappen aseguró que no le caía bien a uno de los comisarios ahí presentes, a quien se refirió como “un idiota”. Dejó entrever que la penalización recibida era una vendetta personal de dicha autoridad. Las palabras de Max iban dirigidas a Gary Connelly, aunque ayer quiso suavizar sus críticas.
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