Guillermo y Federico, los Arrieta, son los nuevos Campeones del Absoluto en el Nacional de Rally. Consiguieron el título sufriendo, el pasado fin de semana en el “Atlántico” tras un año en el que supieron hacer ventaja. Quien los conoce, dice que son un amalgama perfecto. Padre e hijo, a fondo, por un pasión compartida que los colocó en la cima en un fin de semana complicado. El piloto tiene la palabra.
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¿Cuando comenzaron los problemas?
“Y, ya en la mitad del segundo tramo empezó un ruido tremendo que yo pensé era un semi eje roto que estaba pegando y seguimos suave, mirando de no taparlo a Guzmán que venía atrás. Cuando llegamos al final vimos que no era eso y que el problema estaba en el diferencial. Hablamos con los muchachos del equipo y llegamos a la conclusión de que lo mejor era tratar de cambiarlo en la asistencia, pero tuvimos que hacer un tramo mas con ese ruido que parecía se iba a partir el auto y llegamos al auxilio, despacio. Y bueno, lo cambiamos y tá, salimos al segundo rulo, en cuyos primeros dos primes pudimos descontar bastante, pero en el último del día pinchamos, y ahí cometí el error de no parar enseguida para cambiar. Seguí y el amortiguador de esa rueda se rompió y tuvimos que parar. Demoramos mucho en cambiar la rueda, se nos cayó el gato, un desastre…Terminamos veintidós. Nos alcanzaba con ser quinto en el Absoluto Nacional, en la etapa no pues se puntúa por etapa, pero no…”
¿Y el domingo?
“Bueno, salimos en mejores condiciones, aunque el diferencial que le pusimos era standard, pero muy presionados, porque un error, un pinchazo, un golpe e íbamos para atrás otra vez, y no nos podíamos dar ese lujo. Pero empezamos a recuperar posiciones hasta que llegamos novenos en la general de la carrera y cuartos en la etapa del Nacional y con esos ya dió para conseguir el título. Pero la verdad, nunca pasé tan nervioso un domingo en mi vida. Fue tremendo. Luego, la emoción sí…”
¿Que decía tu hijo cuando finalmente terminaron Campeones?
“Y…explotó..Todos los kilómetros a plena adrenalina que vivimos, incluyendo una salida del camino ya en el primer tramo, de la que se encargó Dios de enmendar…. El auto empezó a calentar, levanté el capó para ventilar un poco, se cayó y rompió el parabrisas…en fin, todo venía con el pie izquierdo. Fue muchísima la presión, así que imagináte él, con 23 años recién cumplidos. Se portó como un Campeón, no se equivocó jamás en el canto de la hoja y siempre dando para adelante como si fuera un veterano.”
¿Y cual es el balance cuando te ves Campeón?
“Lo primero que saco en conclusión es que fácil nunca se nos ha dado nada. Las circunstancias se dieron, nos ayudaron, no somos los mas rápidos, eso está clarísimo, pero tuvimos la constancia, la confiabilidad…Ha sido una gran alegría para todos, para la familia, para los mecánicos que tanto han trabajado…”
¿Te planteás que viene ahora?
“No, todavía no, no hemos pensado. Queríamos ganar este Campeonato y ahora ni tiempo hemos tenido. Desde que terminamos no paramos de recibir llamados, y no empezamos los festejos. Vamos a tener que pagar unos cuantos asados, así que voy a tener que hablar con mi amigo Raúl Braceras de Mercado Río de la Plata..“
¿Que te pareció el accionar de Guzmán Rivero para ganar la RC2N?
“Se lo merecía. Anduvo rapidísimo todo el Rally, se manejó todo, hay que sacarse el sombrero…”
¿Si tuvieras que hacer un balance de tus experiencias en pista o rally, con cual te quedás?
“Rally, sí, sí, porque estás permanentemente improvisando, aparecen cosas que no estaban previstas, el piso cambia, al igual que las reacciones del auto, que no tienen nada que ver con cuando hacés la hoja a 90 k.h. La adrenalina va desde que largás hasta el Stop. En la pista, no se vive tanto, quizás en la largada o en alguna maniobra, pero es mas metódico. En Rally no sabés como te vas a encontrar la curva siguiente. Hay muchas mas variables, que en la pista no las tenés, y estás acostumbrado a frenar en el último centímetro”.
¿Sentís que tenés mucho mas para aprender?
“Sí, claaaaaro! Por supuesto. Lo que pasa es que también hay un grado de riesgo que asumir que por un tema de edad, de responsabilidad, no lo tomás. Ese es el asunto fundamental. Y a lo mejor en la pista si lo tomás, porque las consecuencias son mas livianas. Me pasé y me enterré. Pero en Rally, capaz que me doy un palo de aquellos…”
¿Y como padre e hijo, como la llevan dentro del auto?
“En carrera no hay otro diálogo que lo referido a la hoja y Fede le agarró muy bien la mano de entrada. Tuvimos un profesor, tanto de manejo, en lo técnico como de copilotaje, como Eduardo (Von Gengross) que nos enseñó muchísimo y todo lo que modestamente sabemos se lo debemos a él”. En los enlaces conversamos, es otra cosa…”
¿Y que pasa si llega un día en el que Federico quiere manejar?
“Encantado, pero yo no le hago de copiloto...( risas). Brillante si quiere correr Rally. Desde mi humilde opinión no sé si es para gente tan joven. Son como gato chico, no le tienen miedo a nada. Y acá, andar tan exigido no está bueno. En la pista sí, hacé lo que quieras. El ya empezó algo con los Superescarabajos, pero lo dejó un poco de lo que estábamos haciendo juntos en el rally…”
¿Estudia?
“Si, y trabaja. Hizo una carrera de marketing y gestión en la ORT, ahora está terminando con el inglés. Trabaja conmigo en Zenex ocho horas. Es muy serio, muy responsable.”
¿Que imaginás que hubiera dicho tu padre de verlos Campeones a los dos?
“Lo pensamos mas de una vez…estaría mas que feliz. Nos acompaña desde arriba en todas las carreras y nos ha ayudado en los momentos difíciles…También es parte..”
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