Remi Taffin, principal de operaciones en la F1 de Renault dijo que “salvo un cambio en la reglamentación no hay nada que puedan hacer en cuanto al sonido de los motores de la máxima categoría”.
Dicho sonido, proveniente del 1.6 Turbo se ha convertido en todo un tema tras las dos primeras carreras en las cuales no gustó a nadie. Sebastian Vettel incluso lo calificó como “una mierda…” comparado con el sonido de los V8 del 2013.
“Hay dos temas” dijo Taffin. “Primero, que bajamos de 18.000 a 12.000 revoluciones para este año, a pesar de que el máximo establecido es de 15.000, pero con las limitaciones en cuanto al consumo de combustible, y así sea un motor Mercedesm Ferrari o Renault, es a 12.000 e incluso al final de una recta podría ser de 11.000 o 10.000 rpm…Esto hace una gran diferencia, especialmente si uno está en las tribunas principales, generalmente frente a los boxes, en la recta generalmente mas larga. El otro tema es el Turbo, pues uno pone algo en el paso de los gases de escape, lo que equivale a poner una almohada en la cara de una persona, actúa como silenciador…Si uno combina los dos, se termina con este resultado en cuanto al sonido…”
Taffin expresó a su vez que “el sonido se incrementaría si pudiéramos elevar las revoluciones, pero esto es imposible con el reglamento mandando el flujo límite de combustible a 100 kg. por hora”
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