A pesar de la lluvia, el barro y la niebla en las colinas al oeste de la capital, Zagreb, Kalle Rovanpera ganó seis de los ocho tramos sobre asfalto con su Toyota GR Yaris para aventajar a un resistente Thierry Neuville por 1 minuto 06.8 segundos, al término de la primera etapa del Rally de Croacia.
El líder del Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA, Rovanperä, se desenvolvió bien en las difíciles condiciones. Ganó tres de las cuatro especiales de la mañana para liderar con 47,5 segundos de ventaja y la amplió durante una tarde igualmente dominante.
Tras haber perdido una valiosa experiencia cuando se estrelló en los primeros kilómetros del debut de Croacia en el WRC hace 12 meses, el finlandés esperaba estar en desventaja. Pero ser el primero en el orden de salida le ayudó, ya que las condiciones fueron empeorando a medida que cada coche arrastraba barro a la carretera.
“Probablemente ha sido uno de mis mejores días en un auto de rally”, dijo Rovanperä con entusiasmo. “Siempre es agradable tener una ventaja, pero también es difícil tener una gran ventaja como ésta. Mañana es un día largo, así que todavía tengo que manejar rápido para seguir concentrado”.
Neuville ha tenido un día muy complicado. El belga completó el cuarteto inicial de tramos a 12,5 segundos de distancia, pero la rotura de la correa del alternador del motor de su Hyundai i20 N hizo que el auto e se detuviera dos veces de camino a la asistencia.
Neuville y su copiloto Martijn Wydaeghe empujaron el auto los últimos 800 metros. La pareja, exhausta, se fue al suelo al llegar con cuatro minutos de retraso y una penalización de 40 segundos les relegó a la cuarta posición. Una tarde animada, que incluyó el mejor tiempo en el último tramo, les devolvió a la segunda posición.
Tenían 19,3 segundos de ventaja sobre su compañero de equipo Ott Tänak. La baja posición de salida del estonio le perjudicó, junto con un pinchazo en la penúltima especial, pero Tänak se conformó con la tercera posición.
Craig Breen ha quedado cuarto en su primera vez a bordo de un Ford Puma en piso mojado, en tanto Oliver Solberg se retrasó por un trompo y tuvo la suerte de sobrevivir a un impacto en una curva llena de agua en su camino a la quinta posición en su i20 N. Estaba a más de un minuto de Breen y a 10,6 segundos de Evans, que impidió a Rovanperä un pleno de victorias de tramos por la mañana.
Esa fue la única alegría del galés, ya que dos pinchazos en su GR Yaris le hicieron perder un tiempo valioso. El galo ha superado en casi 40 segundos al coche similar de un Takamoto Katsuta poco confiado.
Gus Greensmith fue octavo tras un día frustrante con su Puma. Un tropiezo en un terraplén le dio un susto al principio, pero un trompo y dos pinchazos en la última especial resultaron más costosos.
El peor problema fue el de Esapekka Lappi, que abandonó con su GR Yaris en el primer tramo tras chocar con una roca destrozando su frontal delantero derecho. Adrien Fourmaux también quedó fuera después de deslizar su Puma a través de un jardín, mientras que su compañero de equipo Pierre-Louis Loubet abandonó cuando tres pinchazos en dos tramos le dejaron sin neumáticos de repuesto.
El líder del WRC2, Yohan Rossel, fue noveno y Nikolay Gryazin, segundo en la categoría, completó el top diez.
La segunda etapa del sábado sigue un formato similar. Se recorren cuatro tramos por la mañana y por la tarde repetidos, excepto el penúltimo de cada bucle, que se dirige más al oeste, hacia la ciudad de Rijeka, en la costa adriática. Los ocho tramos suman 116,98 km.
