El británico Lewis Hamilton no considera que su victoria en el Gran Premio de Canadá sea un alivio tras el fallo de su equipo que le privó de ganar en Mónaco hace dos semanas.
El inglés dominaba con claridad la carrera de Mónaco cuando fue llamado por su equipo para hacer una parada. Al regresar a la pista lo hizo por detrás de su compañero, el alemán Nico Rosberg, y del también germano Sebastian Vettel.
Rosberg se hizo con el triunfo, por delante de Vettel y de Hamilton, que se quedó sin una victoria cantada.
“No siento que necesitara ser aliviado. También fui el más rápido el fin de semana anterior”, señaló Hamilton.
“Tuve aquel problema que permitió a Nico ganar la carrera, pero yo he tenido ritmo suficiente en estas dos últimas carreras”, señaló.
“No es ningún alivio. No me hacía falta. Lo importante es que nos mantenemos fuertes”.
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