Dimitar Iliev y Yanaki Yanakiev festejan su sexta victoria en el Sliven Rally de su país.
Dimitar Iliev ha conseguido este domingo su sexta victoria en el Sliven Rally de Bulgaria, undécima fecha del IRC (Intercontinental Rally Challenge). El que podríamos denominar como “el Loeb búlgaro” por sus seis títulos nacionales de la especialidad, ha llevado con maestría su Skoda Fabia S2000, asistido desde la butaca derecha por Yanaki Yanakiev, ganando 6 de las 13 pruebas especiales (SS) y quedando segundo en 5 más.
Su rival más aguerrido y segundo al final fue el también búlgaro Petar Gyoshev con un Peugeot 207 S2000 que finalizaba a sólo 11,2 segundos por detrás. Tercero quedaba otro Peugeot con el piloto local Krum Donchev, que conseguía subirse al podio en los tres tramos finales del domingo.
El cuarto fue un destacadísimo Todor Slavov a bordo de un Renault Clio R3 de dos ruedas motrices, que estuvo tercero en la general durante gran parte del rally, pero debió ceder al final porque el terreno no favorecía a su montura. La Organización del IRC lo eligió justificadamente como ganador del Trofeo Colin McRae Flat Out, cosa que el altísimo búlgaro agradeció emocionado.
Para el francés Robert Consani su participación en Bulgaria fue un calvario, primero para conseguir el presupuesto y después porque el Renault Mégane RS acusó problemas técnicos durante toda la prueba. Finalmente el premio era un octavo puesto en la general y la victoria en la copa de Producción, quedando primero del Campeonato tanto en esta categoría como en la de dos ruedas motrices.
Todor Slavov tuvo una espectacular actuación con su Clio R3 y fue cuarto al final.
El Sliven Rally ha sido muy exigente, con diferentes características de piso y con especiales con promedios sobre los 120 km/h. Muchos pilotos se han quejado de cierta peligrosidad en los tramos debido a la gran cantidad de grava que ensuciaba el asfalto en algunos puntos. Por suerte las salidas de ruta que hubo no fueron nunca graves.
Es interesante ver lo bien organizado que ha estado este rally, mostrando además una gran profesionalidad no sólo por parte de los organizadores, sino también de los participantes con equipos y coches muy bien presentados, sin nada que envidiar a cualquier escuadra mundialista. Además la ausencia de las grandes estrellas del IRC ha permitido que muchos pilotos, que pasan desapercibidos en fechas con mayor participación, obtuvieran una mayor atención sobre su calidad conductiva.
A partir de ahora el IRC entra en su recta final con el Rallye Sanremo (asfalto) en Italia en dos semanas y el Rally de Chipre (tierra) a partir del 2 de noviembre. Dadas las últimas noticias estaremos ante el canto del cisne de este Campeonato tal como lo conocemos desde los últimos seis años. Probablemente estaremos ante un Campeonato Europeo más fuerte y un IRC que es posible que tenga un formato testimonial con una media docena de rallyes alrededor del mundo, pero eso ya será otra historia…
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DOSEFES
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