Mads Ostberg realizó una gran tarea en el pasado Rally de México, truncada por su abandono por problemas mecánicos en su Ford Fiesta del Qatar M-Sport.
El piloto, que ha demostrado un claro dominio de su auto y ha sido el único capaz de plantarle batalla a Sébastien Ogier y su Volkswagen, se embarcó en una aventura –que por cierto, no es la primera vez- que consistía en batir el récord de salto sobre nieve. Y lo logró.
El desafío era claro: intentar conseguir un vuelo mayor de 60 metros, sobre un auto del WRC, en piso nevado. La dificultad está dada por el terreno, pues para lograr el salto, el auto debe llevar una velocidad precisa, complicada de lograr por el piso resbaladizo.
Tras cinco intentos, en los que hubo que modificar la dureza de los amortiguadores, y algunos otros detalles del auto, el noruego logró un vuelo de 60.48 metros con su Ford, lo que alcanzó para ostentar el récord del mayor salto sobre nieve, en un auto de esa clase.
“Fue una sensación fantástica, me encantó”, dijo el piloto. “Cuando estaba volando solo quería mantenerme tanto tiempo en el aire como fuera posible. Quería un poco más y no quería llegar al suelo”.
“Conseguir una gran velocidad fue el reto mayor”, señaló. “Hicimos otro salto que no superamos los 30 metros y nos costaba mucho coger velocidad”.
“Estábamos cerca de los 150 kilómetros por hora y necesitábamos un poco más para superar los 60 metros. Al final todo salió bien, hicimos lo máximo posible. Tal vez vayamos a superar el récord el próximo año”.
Es que, como decíamos, no es la primera vez que el piloto intenta algo similar. Hace casi exactamente un año, Ostberg había superado los 50 metros en un salto parecido.
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