La Federación Uruguaya de Automovilismo (FUAD) aplicó una dura sanción al piloto de la categoría Super Chevette tras un incidente protagonizado en el autódromo de la ciudad de Salto a comienzos de setiembre.
Luego de escuchar los descargos del piloto Gustavo Fernández, la entidad rectora del deporte motor uruguayo decidió aplicarle una sanción dura y rara vez vista: 10 años de suspensión. Es decir, hasta el 2023 no podrá subirse a un auto de carreras ni en Uruguay ni en el exterior.
Durante la competencia final de la categoría Super Chevette, Gutavo Fernández tuvo un incidente con un rival y quedó fuera de competencia.
Al giro siguiente y cuando el rival pasó frente al piloto Gustavo Fernández, éste lo esperaba con una piedra de proporciones la que arrojó contra el parabrisas del auto de su rival ocasionándole un boquete al vidrio en tanto el “cascote” impactaba contra el tórax del piloto.
Gustavo Fernández fue retirado de la pista por la Policía y su rival fue llevado de inmediato a un control médico el que no arrojó lesiones de entidad.
MARIO ROSA
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