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Sébastien Ogier besa su trofeo como ganador de la Race of Champions.
Sébastien Ogier ha ganado la Carrera de Campeones esta tarde en el ESPRIT Arena de Düsseldorf con un sorprendente rendimiento, teniendo en cuenta que se trataba de su primera participación en el evento.
La final de la Race of Champions (ROC) la resolvió el francés frente al veteranísimo Tom Kristensen en dos mangas. La primera fue a bordo de los buggys ROC y la segunda y definitiva con los Audi R8 LMS.
Ogier había perdido sólo una manga de las siete en que participó en la tarde y había clasificado como segundo del Grupo B para cuartos de final donde eliminó al británico Andy Priaulx. En semifinales era el Campeón del DTM Martin Tomczyk quien caía sorprendentemente ante el chico de Gap al volante del Audi R8.
Kristensen por su parte había ganado el Grupo D para vencer en cuartos a Jenson Button y dejar fuera nada menos que a Michael Schumacher en una semifinal de fulgurante epílogo sobre los KTM X-bows. El danés salía un poco por detrás del alemán en la última curva, pero consiguió una mejor aceleración en la pequeña recta de meta y lo batió por apenas 18 milésimas de segundo.
La tarde dejó como es costumbre en este evento un montón de imágenes espectaculares, con giros en dos ruedas, trompos y demás por parte de los distintos participantes. También se pudieron ver vueltas de exhibición como por ejemplo las de Stig Blomqvist a bordo del fabuloso Audi Sport quattro o las del propio Sébastien Ogier presentando el Volkswagen Polo R WRC.
En las tribunas un público eminentemente familiar, con muchos niños presentes, disfrutaba de la jornada entre salchichas, bebidas, banderitas y globos. Se notaba también una presencia bastante internacional que ondeaba banderas que iban desde la francesa hasta la rusa, en claro apoyo a la presencia de Vitaly Petrov, quien tuvo el honor de conducir un Lotus-Renault Tri-plaza en el difícil circuito, zarandeando de lo lindo a sus sufridos pasajeros. El público germano tuvo una decepción al no tener a uno de los suyos en lo mas alto del podio pero aplaudió igual deportivamente al ganador que vestía ya los colores de Volkswagen.
Ogier declaraba al final: “Estoy muy feliz. Ha sido un muy bonito fin de semana y una gran diversión conducir aquí. Ha sido increíble, especialmente ganar contra el Sr. Kristensen que tiene tanta experiencia.”
Se ha cerrado así una nueva edición de la Carrera de Campeones, siempre bajo la dirección de Michéle Mouton y su equipo. Se desconoce por el momento cuál puede ser el destino de la próxima edición, aunque suena bastante la posibilidad de llevarla hacia Oriente. El tema financiero siempre será determinante para ello.
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DOSEFES
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