La Unión Europea obligará a los fabricantes de autos a incorporar de serie el detector de presión de los neumáticos. Esto regirá para las unidades fabricadas a partir de este jueves, 1 de Noviembre.
La medida es resultado de un estudio realizado por varios fabricantes de neumáticos, de la importancia de Pirelli, por ejemplo, que ha verificado la escasa importancia que los conductores dan no sólo al estado de sus gomas sino a la presión de las mismas. Esto es fundamental, por ejemplo en una buena frenada y obviamente aumenta las posibilidades de pinchar o simplemente desllantar un neumático.
La UNECE, organismo encargado de regular en esta materia a nivel europeo ha destacado que los sensores de presión válidos son aquellos formados por un sensor inalámbrico colocado en cada neumático y un receptor, con respuesta de información al conductor tanto visual como acústicamente. El sistema completo cuesta en Europa aproximadamente 100 Euros.
Lamentablemente esto no aplica a los automóviles fabricados en otros continentes, pero de a poco se va creando una conciencia al respecto y por cierto, en algunas marcas ya aprovechamos de este importante elemento en nuestro país.
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