Takuma Sato regresó a la victoria en la IndyCar, al beneficiarse de las banderas amarillas y tras contener la presión de Ryan Hunter-Reay, en el circuito de Portland, penúltima fecha del año.
El japonés, quien tuvo un incidente en los entrenamientos y clasificó vigésimo se jugó luego a que su estrategia de dos detenciones bajo bandera verde fructificara, aunque fue gracias a tres incidentes múltiples, que ocurrieron en las últimas 60 vueltas, los que lo llevaron al liderazgo de la carrera. En el final se dedicó a defenderse del estadounidense, rompiendo así su sequía de más de un año sin triunfos.
Hunter-Reay y Sébastien Bourdais completaron el podio de una jornada que se caracterizó por un aparatoso accidente entre seis autos en la vuelta inicial, el cual iniciaron Zach Veach y James Hinchcliffe, generando una “reacción en cadena” que incluso determinó que el auto de Marco Andretti pasara por encima del de Hinchcliffe.
Scott Dixon, líder del Campeonato, pese a hacer una salida de pista en la que sufrió algunos daños cosméticos en su alerón delantero volvió muy reazagado, pero junto con Sato, Sébastien Bourdais y Simon Pagenaud ahorraron combustible al máximo para hacer sólo dos ingresos para reabastecimientos.
En contraste, Alexander Rossi, Josef Newgarden y Will Power fueron los grandes perdedores de la jornada al no aprovechar los problemas de Dixon; mientras el ganador de la Indy 500 de este año tuvo problemas en su caja de cambios y una salida de pista, la serie de neutralizaciones que provocaron Santino Ferrucci y Veach arruinaron su estrategia, al ingresar a los pits en los momentos menos oportunos, cayendo a la parte media del clasificador, del cual no lograron recuperarse.
Pese a ser sancionado por una violación en el límite de velocidad en flos pits, pero sin perder tiempo con las apariciones del Auto de Seguridad, Dixon salvó el quinto lugar y con el octavo puesto de Rossi, el neozelandés tiene ahora una ventaja de 29 puntos sobre el ex Fórmula 1, siendo los únicos con posibilidades reales de ganar la Copa en la última cita del calendario, en Sonoma. Newgarden terminó décimo y, junto con Power, necesitan de una gran combinación matemática en los resultados para coronarse.
Para Sato es su primera victoria con el equipo Rahal Letterman Lanigan Racing y la tercera en la IndyCar, después de vencer en las calles de Long Beach en 2013 con AJ Foyt Racing y en la Indy 500 de 2017 con Andretti Autosport.
La última fecha del campeonato se desarrollará el domingo 16 de septiembre, en Sonoma, California.