Ya era muy raro que su nombre no estuviera allí: Ferruccio Lamborghini fue ingresado en el “Automotive Hall of Fame” justicia para quien un día se enojó con Don Enzo y decidió fabricar autos

Detroit ha sido la “Capital del Automóvil” en otrora brillantes tiempos para esta industria en los Estados Unidos y mantiene entre las atracciones a visitar un Museo impresionante dónde está tambien instalado el “Automotive Hall of Fame”, un Salón de la Fama que homenajea a las mas destacadas figuras mundiales en la historia global de los cuatro ruedas.

Pues bien, en las pasadas horas el fundador de Lamborghini, Ferrruccio fue ingresado al mismo en un acto de justicia para quien tiene su apellido en la mente de cualquier amante de los automóviles, especialmente si son deportivos.

El Automotive Hall of Fame de Detroit. (Click aquí para ampliar)

Muchos de Uds. ya saben que Ferruccio Lamborghini prosperó fabricando tractores y de su fortuna fue dedicando dinero a la compra de Ferraris, hasta que llegó a un par de modelos que encontró no confiables, y fue a confrontar al respecto con el mismísimo Don Enzo, quien en las crónicas de la época parece no haberle dado respuestas satisfactorias al nacido en Cento, provincia de Ferrara allá por 1916.

Por ello Ferruccio Arturo, casado tres veces y padre de Tonino y Patocarlo, decidió fabricar su propia línea de deportivos, comenzando con el 350 GT que fue presentado en el Salón de Ginebra de 1964. Era impulsado por un 3.5 V12 que por ese entonces erogaba impresionantes 350 HP.

El “Miura” fue fabricado desde 1960 a 1972, un ícono en esos años. Una coupé dos puertas, tracción trasera, con motor V12 atmosférico y 350 HP. (Click aquí para ampliar).

Un año mas tarde comenzó a hacerse notar en forma importante con el “Miura”, con su motor central y carrocería de estilo radical. Ya allí Ferruccio comenzó a utilizar el logotipo del Toro, bautizando luego, casi sin excepciones a sus modelos en homenaje a famosos toros de lidia. ¿Porqué el Toro? Por su signo zodiacal.

El “Countach”, dieseñado por el argentino Horacio Pagani, se fabricó de 1974 a 1990, combinando en su carrocería el aluminio con la fibra de vidrio. (Click aquí para ampliar).

Luego vino el “Countach”, hasta que en los setenta comenzó el cambio de manos, incluyendo ser propiedad de Chrysler antes de recalar en forma definitiva en el grupo Volkswagen, responsable de los últimos y excepcionales Lambo.

A 29 años de su fallecimiento en Peruggia, a sus 76 años, una placa de mármol -con su firma grabada- homenajea su inventiva en el Hall of Fame, cerquita del museo Henry Ford, en Dearborn, pequeña ciudad no muy alejada del centro de Detroit, dónde curiosamente mas del 50% de su población es de ascendencia musulmana. Desde 1942 a 1978 había un lema en el pueblo de 90.000 habitantes: “en Dearborn, el sol nunca ilumina a un negro aquí”, de esas segregaciones que mas tardaron en demolerse…

Unos 280 nombres han sido “inducted” (que debería traducirse, con dudas, como instalados) en el Hall Of Fame, incluyendo a los fundadores de Bugatti, Ford, Chevrolet, Benz, Chrysler, Citroen, Damler, Dodge, Duesemberg, Durant, Ferrari, Ford, Honda, Maybach, Peugeot, Porsche, Renault, Toyota y muchos más.

La titularidad de la marca había pasado a manos de la compañía Megatech en 1994. Cuatro años más tarde, y al borde de la quiebra, Lamborghini fue adquirida por el Grupo Volkswagen, donde opera bajo tutela de Audi AG.

No tuvo bajo su batuta a los ultimos geniales Lambos como el “Aventador, el “Diablo”, el Huracán, el Murciélago o la nueva SUV “Urus”, actualmente el vehículo mas barato de la marca con sus 240.000 Euros.

Cito aparte al “Veneno”, elegido en su momento por “Car and Driver” como el deportivo mas espectacular de la historia.

Por aquello de “sobre gustos no hay nada definitivo” siempre estamos, también entre automóviles, en un terreno opinable, pero hay algo muy claro: los hay feos, ni fu ni fa, interesantes, futuristas y excitantes y a esta última estirpe, desde siempre ha pertenecido los Lambo.

APUNTANDO AL TERZO MILLENNIO

Hace unos años tuve la oportunidad de visitar la famosa fábrica ubicada en Sant ‘Agata Bolognese, en el municipio de Bolonia. Fueron algunos sectores nada mas, pues en unos pocos se venía gestando lo que luego fue conocido el de los “modelos del tercer milenio, prototipos impresionantes que han ido viendo la luz con el correr del tiempo.

El Lamborghini Sian vale 4.500.000 de dólares y es potenciado por un lujoso motor de 6.500 cc. capaz de 750 HP. (Click aquí para ampliar).

Hay una premisa pues Automobili Lamborghini mira al futuro con un enfoque visionario, “llevando al extremo los valores que están en su ADN“, y fijando las exigencias del tercer milenio en materia de ahorro energético y materiales innovadores, para marcar su rumbo dentro del segmento de los superdeportivos eléctricos para “garantizar una experiencia de conducción absoluta”.

Lleva tiempo hacerse intemporalen el caso de Lamborghini, unos 8.700 autos, espectaculares, entregados en todo el mundo.

Ah, y si se siguen fabricando tractores, con la misma filosofía que guía a los que llevan la capa roja frente al Toro.

Cuatro cilindros, Turbo….(Click aquí para ampliar)

Por ello, Clap, Clap, Clap a la decisión de incluir a don Ferruccio en el Hall of Fame (“About time” dirían en Detroit).