Regresará a Citroen procurando reverdecer una asociación muy fructífera.
Sebastien Ogier, a sus 34 años de edad, vuelve al equipo Citroen para el Mundial de Rally 2019, tal cual hemos venido adelantando.
Ogier dejó claro el mes pasado que firmaría un contrato final en el WRC antes de terminar su carrera en un Campeonato que ha dominado en las últimas temporadas, pero no hay confirmación de cuánto tiempo será su contrato.
Cinco títulos mundiales consecutivos con Volkswagen Motorsport y M-Sport Ford le han convertido en el segundo piloto más exitoso del WRC después de su ex compañero de equipo Sébastien Loeb.
Ogier ha dicho que un factor clave detrás de su cambio fue el deseo de ganar el campeonato con un tercer equipo, algo que sólo Juha Kankkunen ha logrado.
“Ha habido varios factores que han influido en mi decisión. Me gusta mucho la idea de volver a trabajar con gente con la que las cosas salieron bastante bien hace unos años y también me entusiasma la oportunidad de intentar conseguir el reto de ser campeón del mundo con un tercer fabricante diferente“, explicó.
“Estoy muy entusiasmado con la perspectiva de afrontar este nuevo reto con Citroën. De hecho, no puedo esperar, sobre todo porque no he olvidado que este es el equipo que me dio por primera vez la oportunidad de competir en el campeonato mundial“.
Ogier ganó el título mundial junior con el Citroën en 2008, antes de hacer su primera aparición en la máxima categoría a finales de esa misma temporada.
Piloteó para Citroën en 2009 y 2010, con lo que consiguió su primera victoria en el WRC en Portugal. Fue ascendido a la cima del equipo en la segunda mitad de 2010, pero se marchó después de la temporada 2011 debido a la creciente tensión entre él, Loeb y la dirección en cuanto a las órdenes del equipo.
Ogier se unió a M-Sport Ford en 2017 después de que Volkswagen se retirara del WRC. El cambio de los alemanes a al equipo privado de Malcolm, dirigido por Wilson, sorprendió a muchos.
“Cuando decidimos unirnos a M-Sport hace dos años, muchos lo consideraban un riesgo. Lo consideré un reto, y juntos logramos algo extraordinario”, dijo.
“Malcolm y su equipo tienen una gran pasión por los rallys, y me gustaría agradecer a todos y cada uno de ellos por lo que han sido dos años increíbles juntos. Ahora es el momento de otro nuevo desafío, pero primero nos centraremos en poner fin a esta asociación especial de la mejor manera posible. El campeonato sigue siendo muy reñido y seguiremos luchando para mantener vivas nuestras posibilidades y seguir presionando hasta el final”.
¿QUE HARA FORD AHORA?
La partida de “Seb” presenta todo un desafío para el equipo M-Sport Ford.
Malcolm Wilson, principal de M-Sport, actual equipo de Ogier que corre como privado, aunque con asistencia directa de Ford, se mostró apesadumbrado tras la decisión del francés: “Estoy triste al saber que ni él ni Julien (por Ingrassia, el copiloto) estarán con nosotros el año que viene. Son realmente parte de la familia y cuando se vayan dejarán un legado similar a los de Colin (por Mc Rae), Carlos (por Sainz), Marcus (por Gronholm) y todos los grandes que han corrido con M-Sport. Los extrañaremos, claro y debo decir que hicimos todo lo posible por retenerlos, pero no fue suficiente. Ahora entraremos en varias negociaciones. Lo que sí sabemos es que tenemos a Teemu (por Suninen) bajo contrato para 2019″.
Elfyn Evans terminará su contrato a fin de temporada, pero podría quedar un año más al mando del Ford Fiesta WRC. Se especula con Kris Meeke, pero el norirlandés está en avanzadas negociaciones para integrarse a Toyota, que perdería a Esapekka Lappi quien también recalaría en Citroen.
Hayden Paddon y Dani Sordo estarían firmando con Hyundai para una temporada mas, por lo que como nombres interesantes para Ford quedarían Craig Breen y Mads Ostberg.