Familias en el automovilismo, exitosas y que sus componentes compiten entre sí, hay muchas. Pessina, Cabeda, Verdecchia, por citar tres casos bien visibles y que reflejan lo dicho. Pero lo que no es frecuente que una familia -en este caso hermanos- lideren dos campeonatos diferentes. Los casos de Fabricio Larratea (Superturismo) y Carolina Larratea (Sonic Racing Cup). Dos hermanos, sexos diferentes y certámenes diferentes hacen de ellos, toda una novedad.
El pasado domingo en el Polideportivo de Mercedes, tuvieron además el plus de ver la bandera a cuadros, cada uno, desde la primera posición. Lo festejaron como correspondía y ambos enfilaron para su Rivera natal locos de la vida. Sueño cumplido: ambos festejaron la victoria el mismo día.
Ciertamente que para Fabricio Larratea la presencia de su hermana Carolina en pista es un elemento más de atención y pone toda su experiencia al servicio de ella.
“Yo estoy loca de la vida. Hacía tiempo que esperaba poder manejar un auto de carreras y cuando apareció la Sonic, no lo dudé. Fabricio me alentó a que lo hiciera y mi familia también. Eso es muy importante para mí. Cuando terminé mi primera carrera en El Pinar fue una enorme emoción porque estaba cumpliendo mi sueño”, destacó Carolina.
“Mi hermano se preocupa mucho por mí. Yo sé que tengo un largo camino, que tengo mucho para aprender. Fabricio me deja los oídos rojos porque me da mucha información, infinidad de consejos. Acá en Mercedes más todavía porque era una pista nueva y muy difícil. Me siento más segura y ahora que hemos avanzado en el campeonato, mi objetivo es poder llegar a fin de año y ganar la Copa de Damas”, destacó.
MARIO ROSA
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