Peugeot se preparó para ganar, y lo logró.
Para la edición 2016 Peugeot se había preparado con todo. De hecho, no sólo el 2008 DKR sufrió modificaciones para hacerle más veloz y confiable, sino que en la filas de pilotos aparecían Carlos Sainz, Stéphane Peterhansel, Cyril Despress, y Sébastien Loeb. Un verdadero Dream Team para asegurarse la victoria. Victoria que vino de la mano de Peterhansel, quien sumó una corona más a su inédito palmarés.
La primera semana estuvo dominada a pleno por Peugeot, y el más veloz en el equipo era el debutante Loeb, quien se anotaba tres victorias parciales para irse arriba en la general, apenas presionado por Peterhansel. Desde MINI se quejaban del buen auto que tenía Peugeot, que pese a ser tracción simple, iba mucho más rápido que los vehículos armados por X-Raid.
Pero con la segunda semana se acabó al menos la parcial hegemonía, pues Loeb, en el primer día de dunas, volcó y quedó por el camino. Sainz debió abandonar por inconvenientes mecánicos un par de días después, quedando al liderato, y casi solo, Peterhansel. Pero por algo le dicen “Monsieur Dakar”, y llevó a la marca del león a la victoria por primera vez en su regreso a la especialidad.
A modo de repaso, a los 50 años, el nacido en Échenoz-la-Méline logró sumar a su palmarés su duodécima conquista del Dakar, seis en motos (1991, 1992, 1993, 1995, 1997 y 1998) y seis en autos (2004, 2005, 2007, 2012, 2013 y 2016), para agigantar el mito de su apodo.
Pasaron 28 años de aquel debut con Yamaha y, desde entonces, fueron 68 etapas ganadas para un apellido que, sin dudas, se ha transformado en el primer sinónimo del Dakar. “La victoria más hermosa para mí será siempre la primera, en moto… pero ganar con Peugeot a los 50 años sería grandioso”, había enfatizado Peterhansel antes de embarcarse hacia Buenos Aires para su 26 participación en la carrera de aventuras más exigente del mundo.
“Ese apodo implica que tienes mucha experiencia y eso tiene mucho de razón porque mi primera victoria fue hace exactamente 25 años. Pero también esta victoria fue posible por el gran trabajo del equipo Peugeot que en su segunda participación logró la conquista del Dakar”, dijo Peterhansel.
Peterhansel terminó primero, administrando una gran ventaja sobre su escolta, el qatarí Nasser Al Attiyah (Mini), defensor del título, que finalizó a 34:58 minutos.“Estoy decepcionado porque quería ganar la carrera, pero un segundo puesto no está mal. Quiero destacar que pudimos descontar gran parte de la ventaja que nos llevaba Stephane (Peterhansel) en estas últimas etapas. Ahora volveré en 2017 para ser campeón”, expresó el jeque qatarí.
Como frutilla de la torta para Loeb y Peugeot, el francés logró victoria parcial en la última etapa del rally, la de este sábado, por delante de Mikko Hirvonene, a quien sobrepasó a poco para el final del día.
De esta manera, Peugeot consiguió su primera conquista en el segundo año desde su regreso al Dakar de la mano de uno de los emblemas de esta competencia.
CLASIFICACIÓN GENERAL FINAL
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