Ron Dennis ha estado involucrado con McLaren desde 1980, y tras 36 años en el equipo y conglomerado tecnológico, este martes confirmó su paso al costado. En realidad la decisión ha sido del resto de los socios del conglomerado, quienes han votado pasarlo a jubilación, sin esperar a que terminara su contrato, el próximo mes de enero de 2017.
Dennis no estaba dispuesto a dejar su cargo, el de presidente y CEO, pero aunque llevó el caso al Tribunal Supremo de Inglaterra la semana pasada para evitar su prejubilación, no tuvo opción. Dennis tiene el 25 por ciento del Grupo McLaren. Al fondo de inversión de Bahréin Mumtalakat le pertenece el 50 por ciento y el 25 restante es de la propiedad del socio de negocios de Ron, Mansour Ojjeh, un francés nacido en Arabia Saudí. Dennis y Ojjeh discutieron hace unos años y el nacido en Arabia estuvo de acuerdo con los de Bahréin en quitar a Ron de en medio. Se cree que el estilo autocrático de Dennis es caduco y nada bueno para el crecimiento de McLaren en el futuro.
Como ultimo intento por mantenerse, Dennis estuvo trabajando por dos años, y tras bambalinas, para tener de nuevo todo el control. Ron había logrado el apoyo de un consorcio de inversores de aquel país y ponían sobre la mesa nada menos que 1.900 millones de euros para hacerse con el control de la compañía de la que era hasta hoy presidente el británico y de la que posee el 25% de las acciones. La oferta, presentada la semana pasada a sus socios no convenció, y se da la noticia que ahora reflejamos.
Tras la salida, Dennis emitió un duro comunicado:
“Ron Dennis confirma que le han pedido que renuncie a sus deberes como presidente y jefe ejecutivo del Grupo de Tecnología de McLaren, tras haber liderado y hecho crecer el negocio, al ser su fuerza creativa durante más de 35 años. Esto es consecuencia de que la mayoría de los accionistas han decidido que tenga una jubilación anticipada. Dennis sigue en las juntas del Grupo de Tecnología de McLaren y de McLaren Automoción Limitado y mantiene acciones significativas en ambas compañías. Trata de hacer honor a sus compromisos con el grupo, antes de lanzar un nuevo fondo de inversiones en tecnología en 2017”.
“Estoy decepcionado de que los representantes de TAG y Mumtalakat, los otros accionistas de McLaren, hayan forzado esta decisión de jubilarme de manera anticipada, a pesar de las grandes advertencias del resto del equipo de administración sobre las posibles consecuencias de sus acciones en el negocio.”
“Las razones que han dado son totalmente falsas, mi estilo de dirección es el mismo de siempre y es uno que ha permitido a McLaren convertirse en un grupo de tecnología de automoción que ha ganado 20 campeonatos de Fórmula 1 y en un negocio que gana 983 millones de euros al año. Durante ese tiempo, he trabajado de cerca con una serie de compañeros de trabajo con talento para mantener a McLaren en la cima de la tecnología, a los que siempre les estaré muy agradecido. Se me ha dejado claro en este proceso que ni TAG ni Mumtalakar comparten mi visión para McLaren y su potencial de crecimiento verdadero, pero mi primera preocupación es el negocio que he construido y sus 3.500 empleados. Continuaré con el uso de mi parte significativa de acciones en ambas compañías y de mis asientos en ambas juntas para proteger los intereses y el valor de McLaren y ayudar a formar su futuro.”
“Además, tengo la intención de lanzar un nuevo fondo de inversión de tecnología una vez que mis compromisos con McLaren acaben. Esto exprimirá mi experiencia, mis recursos financieros con una inversión externa para perseguir muchas oportunidades comerciales que me han ofrecido en los últimos años pero que no he podido aceptar porque estaba comprometido al negocio existente”.
Comentarios