Kalle Rovanperä, llegó a Finlandia a ganar por vez primera como local y con una ventaja de 55 puntos en el Campeonato. Pero luego de cinco scratch consecutivos, y con casi 6 segundos de ventaja sobre Elfyn Evans sufrió un aparatoso vuelco que lo dejó fuera de carrera en el PC 7.
Kale y su copilotom Jonne Halttunen salieron ilesos, no así su Yaris Rally1 con una rueda de menos y de techo sobre el camino.
La etapa, a esa altura ya había producido tres bajas importantes: Ott Tanak (motor), Esapekka Lappi (contra un árbol) y Pierre Louis Loubet (fuera de ruta) por lo que Evans quedó como líder con casi 7 segundos de ventaja sobre Thierry Neuville.
La jornada del belga tampoco estuvo exenta de incidentes, pues sufrió la falta de tracción trasera al principio del día y tuvo problemas de visibilidad bajo la lluvia dispersa en varias ocasiones. Al final de la etapa, Takamoto Katsuta, de Toyota, quien ganó el primer tramo, quedó tercero.
En cuarta posición de la general y a un paso del podio se ubicó Teemu Suninen, con el Hyundai i20N a 12″ de Katsuta.
El director del equipo Toyota, Jari-Matti Latvala, completó los cinco primeros en su primera prueba en el WRC desde 2020. Detrás de él estaba se colocó Jari Huttunen, quien lidera el WRC2 en un Škoda Fabia RS Rally2 después de superar a Sami Pajari cuando éste sufrió daños en los neumáticos en el penúltimo tramo del día.
Nikolay Gryazin, Oliver Solberg y Adrien Fourmaux completan el top 10 con la mira puesta en mañana, el día más largo del rally, con ocho especiales que suman 160,68 km.
TRAS LA PRIMERA ETAPA
