Urrutia: la carrera por el Gran Premio local

El joven se metió en el corazón de los uruguayos

Ya en Uruguay y afincado con su familia en su Miguelete (Colonia) natal, el joven piloto compatriota Santiago Urrutia regresó a su país con el sentimiento del deber cumplido e incluso, ir más allá de los que hace siete u ocho meses atrás imaginó cuando bolso en mano, arrancó rumbo a Italia para radicarse en Forlí.

En un rápido repaso de la temporada 2013, el joven piloto uruguayo señaló que no hay nada de qué arrepentirse y mucho menos, nada que reprocharse. Asegura haber rendido el 101% en cada instancia que salió a pista “por convicción y por respeto a todos, absolutamente a todos los que me apoyaron este año”, indicó.

Consultado respecto a si sentía que podía cerrar el año con un triunfo en Montmeló, Barcelona, Santiago Urrutia explicó que fueron dos carreras muy difíciles porque se estaba definiendo el campeonato de pilotos y el campeonato por equipos y que los pilotos referentes de este año, fueron con todo.

“Lo que más quería era cerrar en el podio y la última carrera empezó complicada. Esta vez no largué bien, además no me salió bien la maniobra de sobrepaso a Sandy Stuvik y en esa incidencia perdí mucho tiempo, quedé atrás. Remontar entonces no era sencillo pero tenía el auto para hacerlo y felizmente lo pude conseguir. Pero fue una carrera tremenda porque estábamos todos tan parejo que tenía que ir al ataque pero a la vez defendiendo”, reseñó respecto a la carrera 16, última del ciclo 2013 de la Fórmula 3 Open.

Ciertamente que despedirse con un triunfo hubiese sido fantástico y si bien a la segunda carrera de Montmeló fue con mayor ilusión, la gran posibilidad estuvo en la primera carrera del fin de semana en Barcelona: “si bien no clasifiqué bien porque no tuve el set up adecuado, si no me equivocaba a mitad de carrera tengo la casi certeza de que podía alcanzarlo a Ed Jones y superarlo. Ese error me retrasó más de un segundo pero en las vueltas finales Jones venía con los neumáticos gastados y si bien yo también los tenía desgastados, mi auto en esas condiciones iba mucho mejor que el de él. Yo creo que si la carrera tenía una o dos vueltas, lo podía pasar. Pero ya está, el segundo puesto fue un gran resultado”.

Respecto a los momentos positivos del año, sin dudas que las victorias en Portimao y en especial la de Silverstone, fueron sus grandes momentos.

No obstante, asegura que nunca pensó que en su primer año en la F3 Open sería competitivo ya desde el comienzo. “Ganar carreras y subir al podio en muchas competencias lo tenía en mente pero recién para mitad de temporada. El hecho de tener cero recorrido en monoplazas de este nivel y casi nula experiencia en autos de carrera me hacía pensar que la adaptación me llevaría más tiempo. Por suerte no fue así y fuimos competitivos ya desde la primera carrera por más que ese fin de semana en Paul Ricard terminé con dos abandonos…”.

Al contrario y en lo que refiere a momentos negativos, Santiago Urrutia los tiene bien claros: “tengo un debe sobre el que voy a tener que trabajar duro y es la clasificación. No me sale bien. Mejoré pero no lo suficiente. Tengo que rendir mejor porque en un automovilismo tan parejo como el actual, clasificar lo más adelante posible es determinante. Lo otro son los errores cometidos que son experiencias pero que si miro hacia atrás, esos errores me imposibilitaron de pelear el campeonato hasta el final. Es verdad que no era el objetivo cuando empezamos el año pero al ver que carrera a carrera estábamos en la pelea por la corona 2013 de la F3 Open, ciertamente que la ilusión de ganarla estaba. Sin dudas que el error de Monza en la segunda carrera fue una pena. Ahí entendí que un error minúsculo puede desencadenar algo grande. Y asi fue, un error muy tonto, insignificante, terminó con el auto golpeando las barreras de contención”.

La experiencia de Abu Dhabi fue extraordinaria pero más allá aún, le llegó en el momento justo: “después de Monza quedé bastante mal, bajoneado. Me fui unos días a despejarme un poco y a conversar con mi tío que fue mi apoyo muchas veces que estaba solo en Italia. Cuando recibí la noticia de que se confirmaba la prueba, me cambió todo. Me enchufé de nuevo, estaba muy motivado y el hecho de saber que iba a estar casi que una semana corrida pilotando un auto de carrera, ya sea con el GP3 o con el F3 Open. Trabajé duro, la espera fue larga. Pero me vino muy bien para salir hacia adelante. Más allá del resultado de las pruebas en Abu Dhabi, estas me llegaron en el momento que más lo precisaba”.

El 2014 en GP3 Series es una posibilidad cierta, concreta. La temporada admite un cupo máximo de 27 pilotos y Santiago Urrutia tiene un lugar entre esos 27 que irán en busca no solo del título Mundial sino de llamar la atención de los managers y directores de equipo de la Fórmula Uno. Como telonera de la máxima categoría, la GP3 Series es una marquesina notable para estos jóvenes talentos y nuestro compatriota tiene la puerta abierta en el team Koiranen GP para sumarse a la vidriera y exponer su talento.

Pero claro, a medida que uno se acerca a la Fórmula Uno, el presupuesto aumenta. El refrán dice que “la velocidad se compra” y cuanto mayor es la velocidad, mayor es el costo.

El escalón de la GP3 Series es –obviamente- una categoría bastante más veloz que la F3 Open y por ende, bastante más costosa que esta última.

“Ahora empieza otra carrera. Para mí, la más difícil”, sostuvo el piloto uruguayo. “No se trata solo de una carrera por el presupuesto sino que además es una carrera contra el tiempo. Las dos cosas tienen que calzar. En Europa los tiempos son distintos a los nuestros y a mediados de diciembre, los equipos que van a pelear por el Campeonato Mundial de la GP3 Series ya están listos para el 2014. No esperan, no se puede. Entonces aquí es la carrera más dura porque es reunir el presupuesto en menos de un mes. Por eso decidimos venirnos enseguida y trabajar de inmediato en eso con papá. Voy a estar unos días con mi familia en Miguelete porque los extrañé mucho sobre todo en los momentos duros”.

Por último, Santiago Urrutia reiteró su sincero y profundo agradecimiento a todos los que le apoyaron, desde lo económico hasta lo afectivo, a todos los medios y periodistas que siguieron su campaña 2013 y que incluso hicieron el esfuerzo de acompañarlo en algunas de las carreras de la F3 Open y en especial, el jovencito coloniense le dedicó un reconocimiento muy especial a los cientos de uruguayos que también hicieron un gran esfuerzo para alentarlo en las tribunas viajando muchísimos kilómetros y en particular, a los aficionados celestes que se hicieron sentir en Montmeló en las dos carreras finales de la temporada: “yo no sé cuántos eran, para mí eran muchísimos. Fue muy emotivo, inolvidable. Después de la segunda carrera me fui a la tribuna a disfrutar con ellos, a agradecerles. Fueron importantes para mí”, concluyó el uruguayo quien por estas horas desarma el bolso en su casa de Miguelete y seguramente, se apresta a disfrutar de una buena cena en familia.

Lo que más se extraña…

Ahora empieza otra carrera: el Gran Premio local.

¿La ganará?

MARIO ROSA

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