Voceros y representantes del Grupo Liberty Media, encabezados por su Presidente Ejecutivo, el empresario norteamericano Chase Carey, expusieron ya sus primeros objetivos en el proceso de tomar el control del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 tras adquirir los derechos comerciales de sus actuales propietarios en un proceso cuya primera fase se extenderá hasta el próximo mes de marzo. Uno de esos objetivos es el rescate del Gran Premio de Las Vegas y el otro es la difusión de las carreras por internet, en modalidad “streaming”.
Carey, quien asistió el pasado miércoles a la reunión que el Grupo de Estrategia de la Federación Internacional del Automóvil realizó en Ginebra, Suiza, recordó que su presencia fue en calidad de observador y “básicamente para aprender sobre la categoría y el modo en que se maneja” pero compartió con medios especializados su visión a inmediato plazo.
“Las Vegas es una ciudad fascinante, así que sería muy bueno que fuéramos ahí”, dijo el empresario, añadiendo que “sería muy bueno que haya más carreras en suelo norteamericano” y reconociendo que no sabía que en el pasado la F-1 hubiese disputado carreras en esa ciudad del estado de Nevada.
El actual regente comercial de la disciplina, Bernie Ecclestone, reconoció haberse “dejado convencer” por los nuevos dueños de la franquicia de la necesidad de “recurrir a internet para difundir las carreras en streaming”, por lo cual ya Liberty Media está “avanzando planes” en este aspecto según dijo Carey.
La F-1 disputó dos carreras en Las Vegas, en noviembre de 1981 y de 1982. La primera tuvo un impacto histórico y nunca igualado al recibir la única final por el título entre dos sudamericanos, el brasileño Nelson Piquet y el argentino Carlos Reutemann, ganada por Nelsinho. La segunda permitió la primera victoria del debutante italiano Michele Alboreto. Ambas se realizaron en un circuito callejero delineado en una sección del gigantesco estacionamiento del Casino Caesars Palace.
Comentarios