Con Ayrton Senna como el máximo ganador de las calles de Mónaco, comienza este jueves la 62º edición de uno de los Grandes Premios más famosos y antiguos del calendario. Es que Mónaco vienen albergando a la Fórmula 1 desde sus inicios, y fue la carrera que, allá por 1929, inauguró la “clasificación”, esa instancia que ordena a los pilotos para la carrera, por tiempos conseguidos en una vuelta,
Varios países han querido arrebatar el glamour que existe en Mónaco, pero no lo han logrado. Abu Dhabi, Dubai, Malasia, y tantos otros nuevos destinos de la Fórmula 1 intentan al menos asemejarse al Principado, pero éste cuenta con la crema y nata europea, y con destacados nombres del automovilismo que han contribuido a la historia. Senna, Schumacher, y por que no Stirling Moss, Patrick Depallier, Graham Hill, Jackie Stewart, Niki Lauda…
Épicas han sido las batallas allí celebradas, cuando la lluvia se hizo presente. Y los pronósticos climatológicos estiman que podría llover tanto el jueves como el domingo, aunque habrá que ver si Charlie Whiting deja que se corra con el pavimento resbaladizo.
Los Mercedes llegarán intentando un nuevo 1-2, y Ferrari tratará de cortar la racha a las Flechas de Plata, pero en el Principado todo puede ocurrir. Se trata del Gran Premio más lento del año, y uno de los que más abandonos registra, pues los muros están allí, muy cerca, aguardando a todo aquel que quiera besarlos.
La firma proveedora de neumáticos llevará los superblandos y los blandos, esperándose una diferencia de 1 segundo entre los diferentes tipos de caucho. Además, la estrategia sugerida es de una parada, cerca del giro 25. La gestión de los neumáticos será fundamental, pero los siempre presentes safety cars pueden dar respiro a las gomas, y además, a la gestión del combustible.
A las 5 de la mañana de nuestro país será la primera tanda libre, y a las 9 la segunda, para dejar el viernes libre al tráfico, volviendo a cerrarse el circuito el sábado, para la clasificación, también a las 9.
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