Bienvenidas sean las medidas que mejoran la seguridad vial y la de los tripulantes del vehículo. Bienvenida entonces, como en su momento la obligatoriedad del cinturón de seguridad (en todos) y del Airbag y del ABS (para autos 0 Km), la del Control Electrónico de Estabilidad que según informó ayer la UNASEV será obligatorio para los automóviles cero kilómetro que se comercialicen a partir de 2022.
También lo será, de acuerdo a un decreto actualmente en vías de aprobación, dicho Control en òmnibus y camiones, a partir de 2024.
El Control Electrónico de Estabilidad, ESC, Es un elemento de seguridad activa desarrollado por la empresa Bosch en los años 90 y se considera uno de los mayores avances en materia de seguridad del vehículo en los últimos años. De hecho se calcula que el 40% de los accidentes de tráfico mortales se deben a derrapes y con este sistema se calcula -en Europa dónde es obligatorio desde 2011- que se han evitado hasta el 80% de este tipo de accidentes. En Uruguay lo vemos en la mayoría de los autos de gama media, y en la totalidad de los de alta gama.
El control de estabilidad (salvo que se desconecte manualmente) está activado permanentemente. En él, un micro PC evalúa las señales de los sensores y comprueba 25 veces por segundo si las maniobras del conductor al volante se corresponden con el movimiento real del vehículo. Si éste se mueve en una dirección diferente a la deseada, la computadora detecta esta situación crítica y reacciona de inmediato, independientemente del conductor. El ESC utiliza el sistema de frenos, desacelerando independientemente cada rueda para mantener estable la trayectoria del vehículo. Con este frenaje selectivo el control de estabilidad genera la necesaria fuerza opuesta, de manera que el vehículo obedece al conductor. El sistema también puede intervenir en el motor para reducir la potencia del mismo. De esta manera, siempre dentro de los límites de la física, el vehículo mantiene con seguridad la trayectoria deseada.
Como se ve, gradualmente nos vamos acompasando, lentamente, a normas del primer mundo. Esperemos que se cumpla y que no haya luego postergaciones.
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