Si nos atenemos a las tres últimas pruebas de clasificación, digo. En ellas, y mas aún en el caso de Montmeló el domingo, Rosberg y Hamilton dominaron para hacerse del 1-2 de la grilla.
Es muy cierto que el auto desarrollado por Ross Brawn se come, literalmente, los neumáticos, pero también lo es que Pirelli proveerá, gradualmente, gomas duras con menor degradación y en un trazado como el de Mónaco, dónde pasar a un rival es virtualmente imposible, la posición en la grilla puede resultar fundamental.
El gran tema, para algunos equipos es justamente el papel preponderante que está jugando este año Pirelli. Les pidieron neumáticos que hicieran por mejores espectáculos y es evidente que lo han logrado, como que ya resulta imposible predecir un equipo dominante. No alcanza con tener el auto mas rápido, sino que hay que administrarlo en función del desgaste de las gomas y son varias las estrategias posibles. Ferrari, por ejemplo, se detuvo cuatro veces en Montmeló en tanto Lotus lo hizo, con Kimi, en tres oportunidades.
El circuito del Principado, dónde se correrá en dos semanas, quizás sea el único dónde obtener la “pole position” puede ser muy trascendente. En el resto, no. Es más, prestando atención a los comunicados de los equipos, les resulta mas importante lo que puedan probar en los entrenamientos, con simulaciones de carrera para prever el desgaste de las gomas, que largar en primera fila.
Por lo expresado, sabiendo que Mercedes tiene un auto muy veloz, podemos augurarlo largando adelante. Y luego…que los pasen, si pueden. Recuerdo especialmente aquella carrera de 1992 cuando Ayrton, con un auto notoriamente menos veloz, contuvo a Mansell durante muchas vueltas, para ganar la carrera.
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