Daniel Ricciardo y la rapidez mental del Red Bull

Daniel Ricciardo tuvo “alas” para volar hacia la victoria en Shanghai. Fue su sexta en la F1 y se basó en una muy buena decisión del equipo.

Una rápida y muy inteligente decisión del equipo Red Bull le dió en el momento justo, en el lugar indicado, el arma a Daniel Ricciardo para ganar el Gran Premio de China. Valtteri Bottas (Mercedes) y Kimi Raikkonen (Ferrari) completaron el podio en una carrera dónde los neumáticos fueron fundamentales.

Ha sido la sexta victoria en la F1 para el australiano nacido en Perth, al oeste de Australia, hace 28 años y quien no ganaba desde Azerbaijan 2017.

Con mas razones que nunca para sonreir, el simpático Ricciardo mostró, por ahora, una excepción a la regla.

Tom y Jerry (leáse Hamilton y Vettel) llegaron cuarto y noveno, con el alemán manteniendo la punta del Campeonato con nueve puntos de ventaja en tanto el Campeón, al ingresar en los puntos es el piloto que mas veces lo ha hecho en forma consecutiva (28 veces) en la historia de la Fórmula 1.

Curiosamente, esta vez ni Ferrari ni Mercedes estuvieron a la altura de la victoria. Los de Maranello por retrasar el ingreso al recambio de Vettel, víctima del “undercut” de Bottas para pasar al frente (vuelta 19 de las 56) y los de Stuttgart por no haber decidido, como Red Bull, aprovechar el ingreso del Safety para ir a boxes por los neumáticos blandos (amarillos) muy superiores en la perfomance permitida que los medios (blancos) con los que fueron hasta el final.

NADA PARA VER HASTA QUE…

Largó bien Vettel haciendo valer su Pole, en tanto Bottas superaba ya en la primera curva a Kimi, con Hamilton cuarto, los dos Red Bull expectantes y ambos Renault en séptimo y octavo.

Vettel largó desde la Pole pero quedó de espalda a buen resultado.

Muy poco para ver salvo el dominio de Sebastian quien le sacó tres segundos a Valtteri, hasta que Mercedes llamó a boxes al finés para colocar “medias”, sacando las “blandas” en una rapidísima operación de sus mecánicos.  Ferrari demoró una vuelta más en hacer lo propio con Vettel y cuando salió el alemán de boxes, ya Bottas estaba primero.

El finés consolidó su liderazgo en los giros siguientes, hasta que ambos llegaron a Raikkonen, a quien Ferrari mandó al sacrificio dejándolo líder, sí, pero con neumáticos degradados. La idea era que Kimi aguantara al de Mercedes, en tanto su compañero de equipo aprovechaba para acercarse. Bottas no esperó nada y cuando estuvo en los escapes de la Ferrari se jugó en el sobrepaso en la curva 1, recapturando la punta, en tanto Raikkonen le cedía gentilmente la posición a Vettel, para que continuara en su batalla por la victoria.

El choque entre Gasly y Hartley dejó muchos restos esparcidos en el sector obligando al ingreso del Safety. Los de Red Bull pensaron rápido…

Pero ocurrió el hecho desencadenante de grandes cambios y fue cuando los dos Toro Rosso se golpearon, al cerrar Hartley la línea de Gasly en la horquilla del trazado de Shanghai. Ambos siguieron en carrera, pero del toque resultaron unos cuantos detritos esparcidos por el sector, obligando a la Dirección de la Prueba a ordenar el ingreso del Safety Car, de manera de poder limpiar dicha zona.

En Red Bull pensaron rápido y bien, dando la orden a sus pilotos de ingresar a boxes a colocar nuevamente los neumáticos blandos. La decisión resultó brillante ya que estaban tercero (Verstappen) y quinto (Ricciardo) y regresaron a la lenta fila india en el cuarto y sexto lugar, pero con neumáticos “de ataque” .

Al relanzarse la carrera, los Red Bull fueron tras sus presas. El australiano pasó rápidamente a Raikkonen (que había cambiado ya a medios antes del Safety) en tanto Verstappen fue por Hamilton. Cuando intentó el sobrepaso, Hamilton se movió para quitarle espacio y terminó con Verstappen fuera de la pista, abortando la maniobra y con tema para seguir machacando en la deteriorada relación entre ambos que había quedado de Baréin.

RICCIARDO HIZO LO SUYO

El alerón abierto ya hizo su obra permitiéndole a Ricciardo superar a Vettel. De allí, el australiano se fue tranquilo a la victoria.

Aprovechó Ricciardo para colocarse como escolta y descontándole a Vettel a razón de un segundo por vuelta se lo tragó sin masticar usando el DRS en la recta opuesta. Quedaban 12 vueltas y la próxima presa de Daniel era el líder Bottas.Demoró un par de giros en ponerse en los escapes del Mercedes hasta que con una diferencia notoria en rendimiento (gracias a sus gomas) lo pasó y se fue rumbo a la bandera a cuadros.

Atrás suyo quedaron Bottas y Raikkonen, éste beneficiado por un toque de Verstappen y Vettel, con trompo como resultado para ambos en el giro 43, maniobra que también resultó perjudicial para Hamilton que debió evadirlos por afuera. El intento fue un desastre para Verstappen, que bien pudo haber elegido otro lugar para el sobrepaso y no sólo terminó golpeando sino que por ello recibió una penalización de diez segundos, por lo que si bien arribó cuarto, fue quinto.

El podio en Shanghai, con el Jefe de Estrategia de Red Bull al lado de Ricciardo.

Para Vettel también fue otro desastre pues terminó cayendo al octavo puesto, siendo superado en el final -con el auto en inferioridad- por Nico Hulkenberg y su Renault y Fernando Alonso con el Mc Laren. Carlos Sainz Jr (Renault) y Kevin Magnussen (Haas) completaron las posiciones puntuables.

En síntesis, nunca mejor aplicada la frase promocional de Red Bull: “It gives you wings”. Efectivamente le dió a Daniel Joseph Ricciardo las alas necesarias para volar por sobre la lógica, y sus competidores, conquistando una victoria que se inició en el estratega del equipo, quien estuvo muy despierto para dormir al resto.

Ahora viene Azerbaiján y el circuito de Baku, en dos semanas. Allí, veremos si esto habrá sido la excepción a la regla que dice que Mercedes y Ferrari están un escalón por encima del resto.

CLASIFICACION FINAL DEL GRAN PREMIO DE CHINA

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