En virtud de las consecuencias del terremoto, los fabricantes japoneses de automóviles enfrentan en estos días una racionalización en el consumo eléctrico a la que buscan soluciones.
Al margen del problema que significa la falta de piezas, pues los proveedores no consiguen cumplir con todos los pedidos, el tema energético parece de difícil solución en el corto plazo.
Ante ello, el diario norteamericano Usa Today informa hoy que un calendario rotativo de armado podría ser la solución para las próximas semanas. Tan simple como que por ejemplo Nissan armaría los lunes, Toyota los martes, Honda los miércoles y así mientras se sustituye la generación de las plantas nucleares afectadas y el tendido eléctrico destruído por el movimiento sísmico y posterior Tsunami.
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