Kalle, el vigente campeón del mundo, que está llevando a cabo un programa selectivo de pruebas en 2024, ni siquiera había planeado comenzar este rally de Polonia, pero fue llamado por su equipo Toyota GAZOO Racing para sustituir a Sébastien Ogier en la última hora. Ogier quedó fuera de carrera por un accidente -choque en ruta pública- durante los reconocimientos del martes, dejando a Rovanperä y a su copiloto Jonne Halttunen con menos de 48 horas para prepararse.
Esos frenéticos preparativos no parecieron afectar demasiado al finlandés, que logró la 13ª victoria de su carrera al volante de un GR Yaris Rally1, aventajando en 28,3 segundos a su compañero de equipo Elfyn Evans en un doblete para Toyota después de que su rival de Hyundai Andreas Mikkelsen cayera en picado el domingo.
Rovanperä comenzó el domingo 9,4 segundos por delante de Mikkelsen, pero el intento del piloto de Hyundai de conseguir una segunda victoria en el Rallye de Polonia se frustró cuando llegó al final del primer tramo con otro neumático fuera de la llanta. Cayó hasta la sexta posición en la meta, mientras Adrien Fourmaux, piloto de M-Sport Ford, completaba el podio a 14,4 segundos de Evans, después que Andreas Mikkelsen cayera en picada.
“Ha sido una semana increíble”, sonrió Rovanperä. “Definitivamente tengo que decir que hemos trabajado muy duro y ahora estamos muy cansados. Creo que lo mejor es que hemos venido aquí, y no ha sido mala idea venir. Hemos ayudado mucho al equipo y hemos sumado muchos puntos para el campeonato de constructores, así que no hemos perdido el tiempo.
Mikkelsen buscaba su primera victoria desde 2016 y lideró la carrera durante todo el viernes antes de quedar por detrás de Rovanperä en el penúltimo tramo. Las gomas destrozaron el paso de rueda trasero de su i20 N y el noruego optó por cruzarlas en los últimos tramos.
“Fue triste lo que pasó hoy”, dijo. “Tuvimos muy mala suerte. Lo correcto después de eso era traer el auto de vuelta para el equipo.”
El rally, de cuatro días de duración, estuvo bendecido por una meteorología calurosa durante todo el recorrido y proporcionó mucha emoción, ya que los pilotos intercambiaron décimas de segundo en unos caminos tremendamente rápidos.
Salvo una delaminación de neumáticos el sábado y un lento pinchazo al final, a Evans le fue bien en comparación con sus principales rivales por el título. El galés superó a Ott Tänak para recuperar el segundo puesto en el campeonato de pilotos recortando el liderato de Thierry Neuville a 15 puntos a falta de seis pruebas.
Un impacto inevitable (un venado se le cruzó en el camino) obligó a Tänak a retirarse el viernes por la mañana, pero volvió a tomar la salida (por reenganche) y pudo rescatar 11 puntos del Super domingo. Su colega de Hyundai Neuville, por su parte, ganó el Wolf Power Stage pero terminó cuarto tras barrer los caminos de piedras sueltas el viernes.
La estrella de Puma, Fourmaux, que logró su tercer podio de la temporada, terminó el rally con 28,1 segundos de ventaja sobre el belga Neuville, mientras que el letón Mārtiņš Sesks logró un quinto puesto en su debut en la máxima categoría. Sesks, que llegó a ser segundo al principio de la prueba, pilotaba un Puma no híbrido, pero cambiará a un auto con todas las máximas especificaciones para su prueba de casa el mes que viene.
Mikkelsen sufrió para llegar a casa más de dos minutos por detrás de Rovanperä en sexta posición por delante de Grégoire Munster y Takamoto Katsuta. El noveno puesto fue para Sami Pajari, ganador de la categoría WRC2, mientras que Oliver Solberg aprovechó un pinchazo de Robert Virves para colarse entre los 10 primeros.
Los rallys veraniegos continuarán el mes que viene con el “Tet Rally de Letonia”, una prueba totalmente nueva para el Campeonato que tendrá su sede en Liepaja del 18 al 21 de Julio.