Verstappen ganó en Texas y ahora lleva 12 de ventaja; fue de las carreras mas emotivas que hemos disfrutado en la F1

De un grande a otro: Shaquille O´Neal entrega el trofeo a Max Verstappen.

Cual es el principal ingrediente necesario para un inolvidable Gran Premio de F1. Siempre lo ha sido la emoción, antes por la lucha directa en pista y un buen ejemplo es cuando en 1979 la TV se olvidó de enfocar durante las ultimas cuatro vueltas a Jabouille, para seguir los constantes sobrepasos -por el segundo lugar- entre Villeneuve y Arnoux (mirálo mas abajo).

En estos tiempos, esos duelos rueda a rueda duran poco. Hasta el toque o hasta que el DRS hace la diferencia, y el que pasa, se va…

Ayer, en el Circuito de las Américas, ni una cosa ni la otra, pero lo brindado por Verstappen, Hamilton y sus respectivos equipos nos deparó una carrera tremenda, entre los dos, sus estrategias y el cronómetro.

Auto a auto, la única batalla fue la que Lewis ganó en la largada, arrancando mejor, metiendo el auto para dejarlo en el lugar conseguido, pese al apretón de Max que orilló el toque.

Hamilton largó mejor y tras la trepada, por el interno, se quedó con la posición en la primera curva.

Luego, la lucha entre los dos aspirantes al título fue decidida por los neumáticos y la estrategia empleada con ellos por cada equipo.

En los primeros giros el Red Bull pareció adaptarse mejor al compuesto medio que el Mercedes, incluso el neerlandés estuvo en los escapes de su rival pero todavía no estaba autorizado el DRS. Luego, entró y salió del segundo de diferencia, pero de nada servía poder ser mas rápido si no sobrepasaba. Por ello, Red Bull jugó su carta.

Max fue a su primer cambio en el giro 10, colocando los “duros” que sentaron muy bien al Red Bull Honda. El “undercut” y los tiempos que comenzó a marcar el neerlandés decidió a Mercedes a ingresar a Lewis, que seguramente veía el mal resultado de permanecer en pista tres vueltas mas. Y no fue nada bueno para los de Totto Wolf pues cuando Hamilton volvió a pista quedó a seis segundos de Verstappen., y con seis de ventaja sobre “Checo”.

La estrategia (y la velocidad de los mecánicos de Red Bull en el recambio) habían resuelto el pleito en forma parcial.

En la vuelta 30, el neerlandés volvió a boxes para un recambio y salió a 17 segundos de Hamilton. ¿Iría el inglés hasta el final con ellos? Muy improbable pero se jugó a estirar su ingreso todo lo posible y se detuvo en la 38. Resultado, Verstappen al frente con 9 segundos de ventaja cuando faltaban 18 giros.

Cuando Hamilton se detuvo por segunda vez en la 38, salió con neumáticos frescos a jugársela, y como un Pac Man fue devorando la ventaja de Verstappen, pero el neerlandés ganó por 1″3.

Pero Lewis tenía neumáticos 8 giros mas frescos que los de Max y recibía este comentario desde su box: “esto se define en las tres ultimas vueltas”.

Hamilton salió a darlo todo, quebró el récord cuando quiso y comenzó a batallar contra el cronómetro, achicando vuelta a vuelta su desventaja (promediando 6 décimas en cada una).

Max había cuidado bien sus gomas: “hay que ser suave con ellas. No se puede bloquear, ni siquiera deslizar el auto en las curvas de alta o baja velocidad. Así que manejé muy limpio…”

Pero antes de ingresar al último giro Mick Schumacher lo enlenteció un poquito. Y allí Max mostró que tenía algo “ahorrado” r, alejando a su rival del segundo necesario de diferencia de manera que el Mercedes no contara con el DRS, en la recta del sector 2, y sin éste extra se le hizo imposible al Campeón un intento que habría sido el único, pero quizás definitorio en su favor.

¡Chapeau para ambos! y un regalo para la audiencia presencial (récord) y la televisiva que vivió con expectativa y emoción, y en muchos casos alentando cual final “burrera” al suyo.

El ideal era un abrazo, pero al menos chocaron sus botellas de champagne. Dos grandes y una definición por venir.

“En la última vuelta” dijo luego Max, “era cuestión de hacer bien el primer sector y el comienzo del segundo, pero no fue fácil pues los neumáticos estaban casi terminados”

Finalmente, Verstappen celebró su victoria por 1″3 de diferencia y aumentó la ventaja en el Campeonato, que ahora es de 12 puntos sobre Hamilton (287,5 contra 275,5 ).

Así es la F1, hoy, y son contados los sobrepasos en pista. La turbulencia que crea el de adelante es preocupación de quien va atrás y quiere pasar, por ello la táctica en el uso de los neumáticos es primordial.

Verstappen, de haber largado bien -por el ritmo mostrado- pudo haber ganado de punta a punta, pero cuando perdió en la primera curva, los de Horner fueron por otro camino: el undercut, ejecutado dos veces para ganar con lo justo. “Es que antes de la primera detención Max estaba contenido y sobrecalentando sus gomas, así que nos decidimos y apostamos…”

La próxima fecha será el 7 de noviembre en México.

RECORDANDO COMO ERAN

La batalla de Villeneuve y Arnoux en Dijon 1979